- Llega un año más, el día más ansiado y esperado para todos los hindúes, el Diwali o la Navidad de los hindúes.

La festividad de Diwali suele caer en el mes de Kartik (octubre/noviembre) en el día oscuro de luna nueva, es decir, la noche más oscura del año.

Diwali o Dipawali significa “hilera de luces”. Se conmemora el retorno del Señor Ram a su reino de Ayodhya después de haber cumplido catorce años de destierro y haber recuperado a su esposa Sita, que fue raptada por el demonio Ravan. Para dar la bienvenida a Sita y Ram, los habitantes de Ayodhya les recibieron con dipas (lamparillas de aceite) y flores, ahí se origino el nombre de Dipawali. La festividad de Diwali se prolonga durante tres días (en algunas regiones del Sur de la India dura hasta cinco días), en los cuáles se realizan ofrendas a Sita y Ram.

La fiesta de Diwali también esta asociada con la Diosa Lakshmi, la Diosa de la Fortuna y Prosperidad. Una de las creencias hindúes es que se cree que la riqueza (Lakshmi) no entrará en la casa si esta a oscuras o sucia, es por eso que se encienden lamparillas de aceite o velas para dar la bienvenida.

Aquí en Ceuta, al igual que en la India, es el tiempo de cerrar los libros de contabilidad y empezar un nuevo año comercial. Es tradicional hacer regalos de oro y plata, así como dar caridad a los necesitados y estrenar alguna prenda de vestir. En la India se celebra con mucho júbilo. Las calles están garladonadas, enormes carteles cuelgan mensajes de felicitaciones, los templos están minuciosamente decorados, enorme bullicio de personas realizando compras, música y cánticos al aire, fuegos artificiales, etc. en definitiva, reina un ambiente festín en la calle.

La festividad de Diwali es muchas veces confundida con el año nuevo hindú, pero no es así, en la India, celebran el año nuevo durante el mes de Phalguna (equivalente a febrero/marzo), en el día de Holi. Podríamos decir que Diwali equivale a las Navidades cristianas. Lo que ocurre es que en la India existen varios calendarios religiosos, uno de ellos es el Vikram Sambat. Este calendario se instauró cuando subió al trono el rey Vikramaditya en el año 57 antes de Cristo. La coronación de Vikramaditya ocurrió el día de Diwali, entonces a partir de aquel día todos los Diwalis no solo se celebra el regreso del Señor Ram después de 14 años de destierro, sino que se celebra la coronación de Vikramaditya en el año 57 antes EC. Para saber el año exacto del Diwali de acuerdo al calendario hindú, solo tenemos que sumar 57 años más al calendario gregoriano (de uso internacional), es decir este año entramos en el 2068 de la Era Vikram.

Cierto que muchos hindúes al no conocer la comparación mas apropiada para definir el Diwali, pues mencionan el Diwali como año Nuevo. De todas maneras lo que cuenta es, el espíritu con que se vive en estas fiestas.

En estos días, la gran mayoría de los hindúes, vivirán unas fiestas señaladas. En mi familia tenemos la costumbre de hacernos regalos, de felicitar a nuestros familiares que residen fuera de Ceuta, a nuestros amigos, a compartir dulces elaborados con mucho cariño, a degustar exquisitos platos en familia, a realizar los rezos comunes, a compartir nuestra alegría con los demás.

Normalmente el primer día suele cobrar mucho protagonismo. A primera hora de la mañana, gran parte de los hindúes realizaran sus ofrendas y rezos particulares en sus respectivos hogares. Mi madre tiene como costumbre cambiar los vestidos de las Deidades, adornar nuestro pequeño altar con flores y lamparitas de aceite.

Al mediodía se comparte un delicioso y exquisito menú vegetariano en plan familiar. Verduras rebozadas, canapés, rollitos de verdura, arroz aromático, legumbres elaboradas, tortas, y una infinidad de dulces caseros.

Es el momento de compartir vivencias, de desear buenos propósitos. En ocasiones invitamos a otros familiares o amigos a comer juntos.

A la tarde, de nuevo, se inicia el rezo del aarti, la ceremonia de adoración a las Deidades principales, Sita Ram, y Lakshmi Narayan. Acto seguido nos dirigimos a nuestros comercios, instauramos un pequeño altar provisional, donde permanecerá las Deidades y parte de la parafernalia durante los días que dura la festividad. Durante el Diwali se realizan ofrendas de frutas y dulces a Lakshmi para propiciar su llegada a los hogares y tiendas. Se procede al aarti y una vez finalizado, compartimos los regalos y los dulces. A la noche, junto con otras familias y amigos solemos cenar en un restaurante de la ciudad.

En los demás días, la ceremonia del aarti sigue vigente tanto de día como de tarde, en casa y en los comercios.

También es momento de compartir, de dar caridad a los mas necesitados. No es extraño que muchos hindúes visiten a los inmigrantes indios y muestren cierta empatía hacia ellos.

En los días previos al Diwali, se suelen organizar eventos deportivos, tales como fútbol, padel o criket, entre todos los miembros, desde los mas pequeños hasta los mas grandes. También es frecuente cierta quedada entre los mas jóvenes, e incluso por genero. Los hombres suelen quedar algunos días previos al Diwali, a tomar unas copas y las mujeres a tomar una merienda conjunta. Este año, el Diwali ha sido especialmente notorio puesto que se ha desarrollado múltiples actividades además de la presentación oficial del Primer Cartel del Diwali en mas de 120 años de presencia hindú en Ceuta, y como no, del bello y emotivo Hermanamiento de la Comunidad Hindú junto a la Hermandad del Roció que celebramos el viernes 21 en el Sagrado Templo.

En estos días, se verá a muchos hindúes, enviando mensajes de textos a móviles, divertidos, alegres, graciosos, etc. en definitiva mensajes cargados de buenos deseos.

Como colofón, la comunidad hindú de Ceuta suele organizar una cena gala con espectáculos y bailes en un día de la semana. Para este año, nos reuniremos todos juntos el sábado día 29, en el Hotel Parador la Muralla.

Es cierto, al igual que ocurre con las demás festividades religiosas o no, cada vez va cobrando más peso el materialismo. Al estrenar nuevas prendas, tenemos la tendencia a compararnos como humanos que somos, a ver quién lleva la ropa mas cara, o la joya con mas diamantes… supongo que ocurre en todas las demás regiones y no sería justo tachar la fiesta de Diwali como una fiesta comercial. Todo está en el uso que hagamos de ella, pero la festividad en sí, es un momento de júbilo y de alegría. Hay muchos que no van a poder compartir de igual manera, ya que algún que otro familiar han fallecido, es momento también para recordarles. Hay otros que se encuentran fuera de negocios y no pueden estar con su familia, otros, como jóvenes estudiantes universitarios que se encuentran afuera estudiando y tampoco podrán asistir a estas fiestas.

Este año, a pesar de las intensas actividades programadas para la festividad de Diwali, conté con muchas dificultades y más cuando mi querido padre sufrió un infarto cardíaco hace un par de semanas. Estas experiencias me han servido de nuevo para reflexionar, que realmente nos debemos de sentir agradecidos por lo que tenemos, y que la salud prevalece por encima de todo, incluso la religión que uno profese. Tengo la suerte de que en este Diwali, podré celebrarlo mañana miércoles en Ceuta con mi familia, los días siguientes participaré en un congreso en Melilla y finalmente en Málaga con mi pareja Neelam y familiares.

Solo me queda desear un feliz Diwali a todos los ceutíes caballas, a todos los hindúes de la comunidad, a mi familia, amigos, compañeros de trabajo y Autoridades.

Y sé que en estos días intentaremos pactar con nosotros mismos, cumplir con algunos anhelos postergados, cambiar aspectos de nuestra vida que necesitan renovarse desde hace tiempo, considerar un cambio de trabajo, ahorrar para el coche o el piso o tal vez planear aquellas vacaciones que no nos hemos permitido tomar.

Pero quizás la partida de este año que puede que no haya tenido piedad para algunos, nos ayude a reflexionar sobre nuestros deseos. Puede que al echar un vistazo a los meses que estamos dejando atrás, nuestro corazón sepa apreciar las cosas que importan y nuestras peticiones no se centren solo en cuestiones materiales. Cierto que estamos en una difícil situación económica, pero seguro que la Diosa Lakshmi nos proveerá.

Prometámonos esas cosas sencillas que nos dejan mejor sabor: como encontrarnos con aquellos buenos amigos que no vemos desde hace tiempo, escuchar con cariño y atención las anécdotas que nuestros padres o abuelos no se cansan de repetir; estar más cerca de nuestros hijos, saludar a esa persona que solemos ignorar, recordar a nuestros cónyuges cuánto los amamos, tomarle el gusto a estar vivos.

Alimentemos nuestro espíritu, y los dulces que compartamos en la mesa de la fiesta serán dulces como nunca. Aferrémonos a la común esperanza de que el estreno de un nuevo almanaque nos ofrezca días mejores. Y como dice la canción, "démosle una oportunidad a la paz".

Feliz Diwali – Happy Diwali – Subh Diwali a TODOS.