- Expresión ciertamente apropiada cuando lo que se pretenden definir, son los tejemanejes que llevan algunos y algunas a cabo en un lugar ya sea público o privado.

En este caso nos centraremos solo en lo público y en concreto en aquello que concierne a nuestro singular Ayuntamiento.

Para ilustrarnos tomemos por ejemplo cualquier sesión plenaria, la del 28 de diciembre mismo, nada diferente a las anteriores. En esta una vez más pudimos observar una verdadera muestra de lo que ha sido toda la actuación de estos "avis politicus" durante este último año, la cual apenas ha variado en sus formas y contenidos y que se ha centrado en exclusiva, en echarse la culpa del uno al otro, con la insistencia con la que una pelota va y viene durante un partido de tenis.

El resultado del peloteo siempre suele ser el mismo y según parece este satisface a todos sus implicados, pues se aprecia claramente que lo único que buscan, es hablar de todo pero sin decir nada, dar la sensación de que por algo se preocupan o que algo defienden, pero sin defenderlo, eso sí, consiguiendo precisamente lo que todos buscan, acaparar cuanto más poder mejor y por supuesto más dinero. Mientras tanto al ciudadano de a pie que le vayan dando algo más que las morcillas de rigor en seguridad, educación, sanidad, inmigración, comunicaciones, empleo y en un largo etcetera en el que por lo general y según mas de una estadística, aparecemos ocupando casi siempre los peores lugares.

Estos pajaritos de diferentes colores, se ve que de lo único que se preocupan es de su imagen de cara a las siguientes elecciones, con el ánimo de renovar una vez más sus poltronas y si te he visto no me acuerdo hasta dentro de otros cuatros años. Hasta entonces a dedicarse a ocupar sillones aquí y allá con acólitos y lacayos, asegurándose así un puesto de salida ventajoso para cuando toquen elecciones. Como ejemplo de lo que digo vaya el cabreo que algunos y algunas de estos plumíferos se han cogido al no "pillar el cacho" esperado con el tema de los cursos de formación o el de los planes de empleo, pues es ahí donde está la guinda de ese voto clientelar del que muchos de estos tan ricamente viven durante todos estos años.

El caso es que soluciones las justas, todo a base de cursito por aquí y plan de empleo por allá, pan para hoy y hambre para mañana como popularmente se dice, eso sí, vivienda todas las que se quieran, en eso sí que no hay discusión y si hay que pedir más dinero para ello pues se pide. Las casas del reclamo las llaman ya, pues cuantas más casas se hacen, más ocupas del otro lado de la frontera nos llegan. Así que suma y sigue porque para estos que llegan, no es cuestión solo de darles un techo, sino que arrastran innumerables problemas estructurales que complican aún más si cabe la ya de por si complicada situación que en esta ciudad se vive.

Cobertura educativa, sanitaria, laboral o asistencial, da igual, ya se han superado con creces todos los límites posibles, pues no solo se trata de satisfacer a duras penas los problemas derivados de una población de más de ochenta mil habitantes hacinada en unos escasos 12 km2 útiles, sino que a la hora de la verdad hay que dar servicio a una ciudad que en realidad supera con creces esa cifra alcanzando a buen seguro los cien mil, ya que no sólo cabe contar a censados o empadronados, sino también a la masa de población que vive en Ceuta sin "papel" alguno y que a pesar de no constar en ningún lado, se las ingenia para sacar provecho de todos y cada uno de nuestros servicios.

Es precisamente en resolver estos temas, donde habrían de poner su ímpetu y empeño todos estos pajaritos y pajaritas de media pluma que revolotean por nuestras instituciones, aunque dudo mucho que tengan algún interés en hacerlo, pues de no mediar todas esas aludidas triquiñuelas, es más que probable que jamas hubiesen pisado esos escaños de los que ahora disfrutan.