Sandra López Cantero

Siempre me he emocionado con las letras de los carnavales, también me he enfadado cuando aquello que dicen no concuerda con mis ideales. Últimamente atacan mucho a Susana Diaz, y no por eso debo de dejar de aplaudir un arte sin precedente. Pero sé perfectamente diferenciar entre opiniones contrarias a mí y aquellas que atacan de manera sistemática la igualdad y por lo que mundialmente tenemos que luchar. 

Quienes componen unas letras para una comparsa o chirigota lo hacen realmente para cantar unos pensamientos inherentes al sentir del grupo, es la identificación plena, sus señas de identidad. 

Yo no puedo pretender que un grupo de machistas no cometan la torpeza y la crueldad de comparar la violencia de género, esa que lleva asesinando desde décadas a miles y miles de mujeres solamente porque son eso, mujeres , con el cuestionable maltrato que hace una mujer hacia un hombre, pero sí puedo denunciarlo alzando mi voz en este espacio. Por cierto, digo cuestionable porque aún estoy esperando a que me describan dónde existe ese mundo matriarcal donde los hombres cobren menos por ser hombres, donde los hombres no alcancen los puestos de responsabilidad por ser hombres, donde los hombres tengan miedo a volver solos a sus casas porque uno de cada tres de ellos serán violados o acosados sexualmente. Un mundo matriarcal donde  la mayor causa de muerte del hombre, junto con el cancer, sea el asesinato cometido por su pareja o ex pareja. 

Un mundo matriarcal donde la opresión sea tal y la desigualdad tan evidente, que para acabar con ella el Estado tuvo que hacer una Ley integral y aún así nos siguen asesinando. 55 mujeres en el último año, 6 mujeres en un mes y medio. Digo yo que cuando todos los partidos políticos y agentes sociales han firmado un pacto para considerar esta lacra como un asunto de Estado, igual que lo fue el terrorismo de ETA, será por algo y no porque lo digan unas cuantas locas feministas como yo.   

¿ De verdad vamos a comparar este terrorismo de género con la agresión puntual que pueda sufrir un hombre? Agresiones cometidas en la mayoría de las ocasiones por otro hombre.  

Vergüenza. 

Sí, siento vergüenza de la letra cantada por la Chirigota que compara las dos violencias como si éstas fueran comparables, ni siquiera iguales . "Las pasotas de copa" dice textualmente " cuando es la hembra la que nos maltrata como unas putas todos se callan", pero más vergüenza siento al ver un teatro entero aplaudiendo  y a un jurado otorgándole un premio. 

Yo no puedo evitar luchar con esa falsa idea de la libertad de expresión, ni puedo pretender que unos machistas no se suban al escenario a cantar sus ideas misóginas sobre el feminismo y la igualdad, pero sí puedo instar al Gobierno de la Ciudad, ese que luego hace un minuto de silencio cada vez que hay una nueva víctima por la violencia machista, o que anuncia su nueva campaña de sensibilización por los bares con esas servilletas en contra de la Violencia de Género, a que le retiren el premio por promover y hace una apología evidente patriarcal. 

Ahí lo dejo.