- El panorama político español tiende a esclarecerse, y para eso la imagen de Albert Rivera está teniendo un papel fundamental, pues el vuelco de la indignación en favor de Podemos se estanca, siendo la consecuencia una mayor reflexión de los ciudadanos sobre quién es quién.

Albert Rivera es el político mejor valorado de España, seguido por otros, claro, pero la cuestión no es quién va detrás, sino la calidad de quien va delante. La opción de sensatez que ofrece C´s suma cada día, y es imparable. Estamos ante un púgil político digno de la mejor mención, y va a resultar muy difícil encontrarle rival.

Los últimos actos de Rivera en la Sexta y Antena 3 han venido a refrendar la posición de C´s y su determinación a participar en la vida política española de una manera determinante, tanto como que ya se perfila como cuarta fuerza política del país, siendo el único partido que mantiene un ascenso que nadie duda en calificar como ejemplar en cuanto forma y fuerza propulsora, teniendo como componente esencial su sensatez y deseo de servir a los españoles, de modo que la política no despierte odio ni ira. La política que propone C´s nace de la humildad, la esperanza y la ilusión.

Ni rojos ni azules, ni ninguna otra cosa que hienda en forma de filo sobre las diferencias culturales y religiosas, sólo ciudadanos libres e iguales, trabajando unidos por un futuro mejor.

Hoy los españoles empiezan a volver sus cabezas para mirar en otro sitio, y cuando ya miran empiezan a ver, y ven una opción política real, sin estigmas, natural, suficientemente fogueada en los polvos del nacionalismo y de los separatismos, una opción fiel a los valores constitucionales, una oferta política, en definitiva, para todos los españoles, para todos los ciudadanos, es decir, sin distinciones, pues el ciudadano es el protagonista principal y perenne de cualquier acción democrática.

C´s define la ciudadanía como la condición que hace libre e iguales a todos, otorga sentido de pertenencia a una comunidad política y une por encima de lengua, cultura o religión e impide el odio al diferente.

Las propuestas de C´s para Ceuta quieren ser coherentes con la naturaleza de la ciudad y tienen como objetivo principal ofrecer a los ciudadanos ceutíes un nuevo modelo de gestión, tanto en administración como en asuntos económicos y sociales, así como en otros que tienen que ver con nuestra condición de frontera con Marruecos, sin olvidar el Estrecho, cordón umbilical por el que fluye identidad y parte de nuestra razón de ser.

C´s es consciente de los contrastes de carácter social, económico y tantos otros que vienen a conformar el perfil de una ciudad que ha malogrado muchas de sus aptitudes, pues nunca hicieron nada para hacerla independiente económicamente, nunca permitieron que se esforzara y aprendiera a resolver sus dificultades por sí misma, nunca le permitieron u ofrecieron posibilidad de explorar otros espacios que no fueran los del crédito bancario y las ayudas de Madrid y Bruselas. Ni con eso, y ahí la deuda, que ya se reconoce en más de 200 millones de euros, con pico nada desdeñable, un lastre que hipoteca futuras generaciones.

Una gestión que siempre tuvo como norte la incapacidad para respetar y responder ante los valores ciudadanos más elementales, entre los que cabe destacar la gestión racional de la “caja de los ciudadanos”, nunca respetando su esencia y manteniendo una custodia sin mácula. Nada de eso fue, ni es ni será, pues el concepto de los recursos económicos generales de los ciudadanos se confunden con los de unos pocos, casi como propios, lo que hace que surja el gasto inconmensurable, sin mayor límite que la voluntad propia y graciosa de pararlo de quienes se constituyen como valedores y defensores de unos administrados a los que llegan a considerar como obligados a agradecer su gestión y representación.

La gestión de los asuntos de los demás debe tener como luz insustituible el deber de hacer lo mejor, y lo mejor es cómo orientar el control financiero, el gasto económico, social, cultural etc., se trata, entre otras cosas, de decir no a quienes nada ofrecen en correspondencia a los ciudadanos, o cuyo aporte al bienestar de los ciudadanos es nulo e infame. Por ahí muestras miles.

Antena 3 ofreció hace unos días un programa que deja clara la dejación institucional, a un lado el carácter vilipendiador de un reportaje hacia unos ciudadanos que son presentados por su religión y no por su carácter de ciudadanos, una demostración más de todos los años de indiferencia y olvido hacia quienes nunca tuvieron sitio en la mente de unos gestores a los que siempre incomodó la idea de la equidad y la igualdad.

C´s es consciente de su capacidad para afrontar los retos de una ciudad como Ceuta, y para tal desafío ofrecemos capacidad de gestión, ideas para racionalizar y asentar los cimientos de una convivencia plena en armonía social, soluciones para afrontar los desafíos económicos, buscando nuevos horizontes que permitan a la ciudad hacerse autosuficiente, dotándola de nuevas posibilidades para la inversión nacional y extranjera, todo ello mediante fórmulas de colaboración con las instituciones y Gobiernos con capacidad para promover nuevos campos para nuevas actuaciones. Y refrendando las palabras de nuestro presidente, queremos que el Estrecho no sea una dificultad y tampoco un motivo para sentirnos diferentes del resto de los españoles. Tampoco nuestros estudiantes ni nuestros mayores.

C´s está adaptando su programa marco a las peculiaridades de la ciudad, a fin de ofrecer a los ciudadanos ceutíes la posibilidad de conocer una nueva forma de hacer política, sin necesidad de recurrir a populismos nacidos en revanchismos que en nada benefician a los ciudadanos.

Apostamos por una ciudad nueva, por los ciudadanos.