Es muy importante que el domingo día 26 de junio todos los españoles acudamos a votar porque es mucho lo que está en juego, fundamentalmente que la recuperación económica llegue a toda la ciudadanía, y que continuemos el proceso de creación de empleo, pues el gran objetivo de esta legislatura va a ser llegar a 20 millones de españoles trabajando. Y para ello es totalmente necesario perseverar en las políticas que han sido útiles, que tan buenos resultados han ofrecido en los últimos cuatro años, y seguir con el proceso de reformas generando tranquilidad y confianza de cara al futuro.

Nadie puede tener dudas respecto a que hemos superado lo peor de la crisis, ya hemos salido de la recesión y del crecimiento económico negativo y estamos en una situación en la que, a poco que hagamos las cosas bien, podamos mirar al futuro con esperanza. Para lo cual tenemos que apostar por una España moderada donde prevalezca la moderación, seguridad, tranquilidad, confianza, estabilidad y certidumbre. Una España en positivo donde resaltemos las cosas que funcionan bien y que no hay que cambiar, y mejorar las cosas que pueden mejorarse.

Algunos y algunas son proclives a contar las cosas que van mal, tergiversando la realidad de un país alabado por nuestros socios europeos y por nuestros aliados mundiales tras haber superado la peor crisis socio económica de nuestra historia democrática. Lo peor que le puede ocurrir a España el 26J es volver a lo que se hizo antes de la llegada al Gobierno del Partido Popular, y aún sería peor apostar por ideologías, planteamientos y políticas que han sido derrotados por la pura realidad hace ya muchos años. Sin ninguna duda, son muchas las cosas de las que podemos sentirnos orgullosos.