- Corren tiempos donde la realidad económica, los servicios básicos de nuestro país y el paro, especialmente el juvenil, no arrojan cifras para sentirnos demasiados optimistas con lo que está sucediendo.

España está peor que hace año y medio. No me satisface ser portador en mis comentarios de malas noticias, o de consideraciones más bien negativas de la situación actual. Bien es cierto, que no sería suficientemente objetivo si todo fuera una descalificación negativa, sin precisar aspectos que puedan haber mejorado algo como es el caso de las exportaciones, la provisional contención de la prima de riesgo y los resultados nacionales del paro correspondientes al mes de mayo, aunque sea un momento puntual.

Los altos representantes del Partido Popular y en este caso me centro en la Sra. de Cospedal y el Sr. Rajoy, inmediatamente que pueden, por supuesto democráticamente tienen todo el derecho en hacerlo, son propensos a hacer panegíricos de autoalabanzas sobre lo bien que están ejerciendo su labor en el Gobierno y las excelentes perspectivas de nuestro país. Tanto el partido gobernante, toda la oposición y el resto de la ciudadanía queremos y deseamos que se produzcan buenas noticias para nuestro país, que el futuro nos pueda deparar las mejores expectativas. Ahora bien, no estoy de acuerdo con un cierto trasfondo de propaganda política en los momentos actuales, igual que se hizo en la campaña electoral y la que se ejerció poniendo como responsable de todos los males del país al anterior Presidente del Gobierno. La propaganda política tiene caducidad, porque los resultados serán los que verifiquen si los triunfos y promesas se han cumplido y los ciudadanos validarán, según su respetable opinión, lo que libremente opinen sobre la actuación realizada, diga lo que diga el Sr. Rajoy, la Sra. de Cospedal o el representante de turno que intervenga.

Sin embargo, los servicios básicos del Estado de Bienestar están en peligro, la educación, la sanidad, las pensiones… Todo ello unido al paro galopante. Pero están en peligro para las clases medias y los sectores sociales más desfavorecidos. Detrás de los problemas que acucian a estos servicios básicos, hay una premeditada y planificada actuación ideológica de la derecha europea y de la derecha nacional, que representa el Partido Popular. Quien no tendrá problemas serán los sectores protegidos por el poder, que están cerca de las oligarquías y de las altas esferas económicas.

Las grandes fortunas, los paraísos fiscales y el problema de la recaudación fiscal no está siendo abordada, a mi modo de entender, con la suficiente decisión, rotundidad y eficacia. Mientras, los afectados por las jubilaciones están viendo aproximarse negros nubarrones, los que están bien protegidos en las altas empresas y en los altos puestos de las entidades financieras cada vez obtienen más beneficios. Los cargos políticos tendrían que dar más ejemplo y moderar más sus salarios, tanto a nivel nacional como local. Dónde planteó el Secretario General del Partido Socialista José Antonio Carracao, respecto a los salarios de los concejales que bien podrían suprimirse y dedicarse a sectores y necesidades que apremian más a los problemas de los ciudadanos de Ceuta, el primero que se opuso fue el Presidente de la Ciudad, porque los sueldos de los políticos debían ser dignos. También deben ser dignos los sueldos del resto de los ciudadanos y también deben tener dignidad los que están en paro.

Este país está teniendo mucha paciencia con la falta de transparencia de determinadas actuaciones políticas, como es el caso Bárcenas. El que haya personas muy respetables en el Partido Popular, no exime de responsabilidad a sus máximos dirigentes. Cada vez entiendo más la postura del principal partido de la oposición, el PSOE y de su Secretario General Alfredo Pérez Rubalcaba, cuando pidió la dimisión del Presidente del Gobierno. El presunto caso de fraude del caso Bárcenas está cada día manchando más la imagen y la falta de transparencia del partido del Gobierno, hasta es expulsado de los juzgados, por tratar presuntamente de manipular actuaciones jurídicas en su beneficio.

Los ciudadanos tomarán nota y todos somos conscientes con lo que está pasando. Alguien inmediatamente podrá afirmar que hay otros casos como los Eres y el Sr. Blanco. Pues bien el PSOE no ha sido expulsado como acusador en el primer tema y no tiene miedo a que se sepa toda la verdad ni pretende ocultar nada. Creo que es bastante diferente su actuación, a la de la Sra. de Cospedal con el “no me consta” y de la actitud del Sr. Rajoy defendiendo a capa y espada al Sr. Bárcenas, en los primeros momentos que se plantearon irregularidades con el que fuera su Tesorero. Los ciudadanos no somos tontos.

En Ceuta si nos detenemos en algunos sectores, también sucede como en el resto del país, la educación está cada día peor, la gestión que se está realizando desde aquí y desde Madrid son nefastas. Hay un descontento generalizado de los Equipos Directivos de todos los centros, así como del profesorado, por los recortes, excesiva ratio, la nulidad en las previsiones…. La falta de transparencia y la funesta gestión del Gobierno de la ciudad en el caso Urbaser, están alcanzando el record de la ineficacia y del desprecio de las instituciones locales a la necesaria y eficaz información a los ciudadanos.

Descuadres de cuentas. Presuntamente se han pagado de más, millones de euros, que podrían haber sido aprovechados para las múltiples necesidades que tiene nuestra ciudad, comenzando por ejemplo con el empleo juvenil, la creación de empleo y las necesidades sociales. Es de esperar que el PSOE, con su Secretario General José Antonio Carracao, no cejen en su empeño de llegar hasta las últimas consecuencias de estos temas, porque a pesar de las descalificaciones que reciba de miembros del Gobierno de la ciudad y de otros altos representantes, es de admirar la coherencia, valentía y trabajo, para seguir actuando sin amedrentarse, porque sólo está pensando en los intereses de Ceuta y de todos sus ciudadanos.

La propaganda política que mencionamos anteriormente para el Sr.Rajoy, también tiene fecha de caducidad para el Sr. Vivas. Aunque legal y democráticamente sea el Presidente de la Ciudad y tenga derecho a expresar lo que considere, lo que diga el Sr. Vivas no es palabra de Dios, no está en la posesión absoluta de la verdad, ni todos los ciudadanos debemos admitir sin rechistar tanto lo que manifieste él como el Sr. Martínez. Lo que expresan no es algo indiscutible, si no lo demuestran fehacientemente.

Afortunadamente para el país y para el Gobierno, el principal partido de la oposición, el PSOE, tiene como principal preocupación a nivel nacional y local, contribuir a que el país y la ciudad salgan adelante, pues Ceuta cada vez tiene peores resultados en el paro, pero se debe mirar prioritariamente porque los problemas que padecemos podamos superarlos entre todos, con acuerdos nacionales o locales. Lo importante es que España y Ceuta se salven de la situación actual, por encima de los resultados electorales y de intereses partidistas.