Es momento de hacer un ejercicio de responsabilidad, echar la vista atrás y recordar la monumental montaña de basuras, con alturas de hasta 40 metros, situada en el que durante décadas fuera el vertedero de Santa Catalina, resultado directo de las políticas medio ambientales de quienes habían dirigido la ciudad hasta ese momento. Un vertedero cuya clausura, por exigencias de la Unión Europea, comenzó en el año 2002, tan solo un año después de la llegada al Gobierno de la Ciudad del candidato popular, Juan Jesús Vivas Lara. Un dirigente político que lideró un proyecto ejecutado en tres fases (clausura, sellado definitivo y transformación de la zona) con una inversión cercana a los 10 millones de euros.
Sobre los terrenos en los que llegó a acumularse, durante 80 años, más de 310.000 metros cúbicos de residuos sólidos acumulados de basura, hoy discurren cuatro kilómetros de caminos entrelazados, sobre distintos pavimentos, salpicado de bancos, plataformas circulares temáticas, aparatos deportivos, césped, arbustos, palmáceas, árboles autóctonos, miradores y zonas de sombras. Un parque característico, que ofrecerá vistas espectaculares del Estrecho y de la orilla peninsular, sumándose al amplio catálogo de infraestructuras urbanas de la Ciudad. Junto a todo ello, la recuperación del “garitón”, fragmento de las antiguas fortificaciones del conjunto monumental del Hacho. Lo que somos, lo que hemos hecho y lo que proponemos seguir haciendo. Vota Juan Vivas, vota Partido Popular.