bicicletas ciclistas

Manifiesto del PSOE por el Día Europeo Sin Coche 2018

El objetivo del Día Europeo Sin Coches que se celebra este sábado, 22 de septiembre, es concienciar a la ciudadanía sobre el impacto medioambiental del transporte y la importancia de apostar por medios de desplazamiento más sostenibles y saludables.

El modelo de transporte contaminante, basado en el predominio de los coches, ya se está enfrentando hoy a la crítica social y cada vez son más los ciudadanos y las ciudadanas que apuestan por medios de locomoción limpios. Más de 8,5 millones de españoles usan la bicicleta semanalmente y más de 18 millones lo hacen de manera regular, según datos del Barómetro de la Bicicleta en España. En la ciudad de Madrid, se realizan entre 60.000 y 80.000 transportes diarios en bicicleta; y la ciudad de Barcelona cuenta ya con 200 kilómetros de infraestructura ciclista.

Poco a poco la revolución sostenible se está instalando en el día a día de los españoles, pero aún resta mucho camino por recorrer para que la ciudadanía asuma plenamente su responsabilidad como consumidora de energía y generadora directa o indirectamente de contaminación.

En España, según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), el sector del transporte es el mayor consumidor de energía final (en torno al 40% total). Además, es el mayor emisor de dióxido de carbono (por encima del 30% de las emisiones totales), ya que la mayor parte de la energía utilizada en el transporte proviene de combustibles derivados del petróleo.

Por otra parte, el aumento de las emisiones de gases contaminantes provocados por el transporte empieza a ser considerado en nuestras ciudades, especialmente en las de mayor tamaño, como una preocupante cuestión de salud pública. No es para menos. La contaminación atmosférica causa 6 millones de muertos cada año en todo el mundo y provoca un cuarto de los cánceres de pulmón, ataques al corazón e infartos cerebrales, significando el 0,3% del PIB mundial en gastos sanitarios.

La contaminación del aire y el cambio climático -los problemas ambientales del planeta más acuciantes- parten de un mismo escenario: el actual modelo energético. Es por ello que la herramienta más eficaz para conseguir ciudades más saludables y libres de contaminación es la transición energética que representa una potente oportunidad de desarrollo económico, generación de empleo y avance tecnológico. La contaminación del aire y el cambio climático no son retos de futuro, son retos ya del presente, por ello, los y las socialistas apostamos por las políticas públicas que pueden transformar nuestro entorno haciéndolo más accesible y transitable: potenciar la movilidad no motorizada, establecer zonas con velocidad reducida en nuestras ciudades, favorecer el uso del coche eléctrico, continuar desarrollando y mejorando el transporte público… Pero la implantación de un modelo energético más sostenible también requiere una amplia complicidad social. El uso de alternativas de movilidad menos contaminantes, el que los ciudadanos y ciudadanas se muevan sin “malos humos”, puede ayudar al medio ambiente y a que las ciudades y los municipios sean más seguros y saludables.