Bueno, a punto de llegar al primer mes de este confinamiento y aquí seguimos todos, unos mejor que otros imagino, pasando las horas y los días esperando que todo esto transcurra lo más rápido posible 

Se podría escribir sobre decenas de temas al respecto: análisis sanitario, económico, político, etc. Gente habrá y nos hartaremos de leer. Podríamos escribir sobre si después de todo esto seremos "mejores" personas, más solidarios, sobre si olvidaremos pronto los problemas de otros cuando no nos afecten directamente, etc, etc, etc.

Pero hoy, si me lo permiten, querría poner el acento en uno de los aspectos sociales de este estado por el que estamos pasando, y más concretamente sobre el aspecto que afecta a las relaciones de pareja. ¿Cómo está afectando todo esto al, ya de por sí intrincado, mundo de las relaciones y los sentimientos?

Habrán leído o escuchado que algunos expertos hablan de un baby boom; otros hablan de un número al alza de divorcios. Se habla de la perdida del deseo sexual; otros, en cambio, hablan de un aumento.

Pero yo me quería centrar en la convivencia en sí. Sabrán, y si no se lo digo yo, que estadísticamente hablando, las vacaciones de verano son las que experimentan un mayor número de separaciones, según los expertos, porque al estar más tiempo juntos se descubren o, simplemente, quedan al descubierto los defectos de una relación.

Así que, si se animan, podrían decirme, si viven o si al menos tienen pareja, cómo les está afectando todo esto en su día a día. Y para ello les lanzo una serie de preguntas. En mi caso solo puedo contestarles a cómo me está afectando el estado de alarma con mi perro. Y la respuesta es: lo veo más bonito, será porque tengo más tiempo para mirarlo.

Y ahora, contesten:

¿Han descubiertos aspectos de su pareja que desconocían?

¿Se ha fortalecido el vínculo quizás?

¿Se han dado cuenta de que esa persona no es tan importante como creían?

¿Quizás han descubierto que esa persona es más importante de lo que

pensaban?

¿Se arrepienten ahora de haber empezado algo?

¿Se arrepienten de no haberlo cuidado más?

¿Han caído en la cuenta de que no podrían convivir con esa persona aunque

la quieran?

¿Se han percatado quizás de que justo lo que necesitan para que la relación

vaya mejor es pasar más tiempo juntos?

Esta pregunta que viene a continuación es muy importante:

¿Creen que a día de hoy son ustedes mismos? O sea, ¿son sus pensamientos

reales o son fruto de esta situación tan excepcional?

¿Seguirán pensando lo mismo cuando pase todo esto?

¿No creen que también deberíamos dejar nuestros sentimientos en cuarentena

porque no estamos en condiciones de pensar lúcidamente?

¿Se arrepentirán muchos de decisiones tomadas en estos días?

¿Se alegrarán, en cambio, enormemente de que haya pasado todo esto?

En fin, preguntas y más preguntas. Me encantaría escucharles, solo si

quieren, claro.

Feliz puente y mucho ánimo para todos/as.