Partido entre España y Marruecos en el Mundial de Rusia 2018
Partido entre España y Marruecos en el Mundial de Rusia 2018

Fútbol, esa mágica palabra que nos lleva hace décadas a olvidarnos durante un rato de las preocupaciones y a deshacernos de parte de nuestra ira y de nuestras frustraciones delante de la televisión. Divertimento para algunos, pasatiempo para otros, aburrido para algunos, pasiones para otros.

Ha querido el destino (¿existe?), que España y Marruecos se crucen en los octavos  del mundial de Qatar, mundial, dicho sea de paso si nos ponemos serios, celebrado en un país y en unas fechas que deberían avergonzarnos, pero...fútbol es fútbol y nos olvidamos de todo.

Si la de por sí el fútbol de selecciones y más en un mundial lleva al éxtasis y a la locura de muchas personas (vean las reacciones de la gente en Argentina, Australia, Senegal, Corea, etc), imaginen un Marruecos-España en una ciudad como Ceuta, donde muchos musulmanes han nacido en España y donde la sinrazón puede llegar, espero que no, a muchos a actos estúpidos y sin sentido.

Mal asunto mezclar religión y fútbol como mal asunto es mezclar la política con la religión, el fútbol con la política, o churros con las merinas.

Para empezar no debemos olvidar que en esto del fútbol sólo puede ganar uno. Resumiendo: en el mundial habrá un ganador y treinta y una decepciones... En un país y un mundo en general, ayer vi una noticia sobre la polarización existente, donde las opiniones se llevan al extremo y cada vez nos radicalizamos más,  el fútbol sirve como vía de escape y muchos lo utilizan para desinhibirse y "relajar" sus conductas.

Y nos plantamos en Ceuta. Ya he leído o escuchado comentarios del tipo: "y este/a, ¿cómo puede querer que España le gane a Marruecos siendo musulmán/a? Volvemos a mezclar asuntos... Comentarios como el anterior o en sentido contrario, me da igual.

Sé que lo que voy a decir suena a buenismo barato pero es lo que pienso: Si gana Marruecos me levanto doy la mano y me voy. Si gana España un seguidor de Marruecos se levanta me da la mano y se va. Tan sencillo como simple, tan difícil y complejo para muchos.

Hace mucho, pero mucho que, personalmente la selección española no despierta mis pasiones, en cuanto al fútbol, el Real Madrid "ocupa" mi corazón y ahí sí que me pongo nervioso de verdad, no lo puedo evitar, y podré dormir regular por perder una Champions (cosa que ocurre poco, je je), pero no pasa de ahí.

Celebraciones fuera de tono tras el pase a octavos de Marruecos han ocurrido en Marruecos y en España, sí, pero recomiendo ver actos vandálicos en Argentina tras dicho pase  octavos o en Australia a las 4 de la mañana. Soy de los que piensa que en todos los países como en todas las profesiones hay gente buena y gente mala, gente con cerebro, gente descerebrada.

Así que si por ejemplo, no es el caso, yo, Salvi, quisiese que Marruecos eliminase a España, pues se me respeta y punto, no hay más. En el caso inverso si Mohamed quisiese que España eliminase a Marruecos, pues se le respeta y punto.

Ayer ya escuché a niños de 13, 14 años en el colegio "provocándose" y medio "citándose" después del partido, medio broma o no, no lo sé. Sería lastimoso que un partido de fútbol llevase a situaciones problemáticas cuando se trata de un juego, sí, son niños,  pero es que los mayores no les estamos dando buen ejemplo precisamente, en un mundo, como digo, cada vez más extremista en nuestra forma de pensar y actuar.

Así que consiste en sentarse delante de la tele, ponerse muy nervioso, ver el partido y que gane el mejor, personalmente creo que España va a eliminar a Marruecos, pero si pierde felicito al que haga falta, sigo con mi rutina, y aquí paz y después gloria.

P. D. Hablando de Marruecos y España y ya puestos a mezclar temas: lo de la valla de Melilla no se lo cree Marlaska así jure en arameo antiguo. ¿Lo peor? Que niega lo evidente. ¿Lo sorprendente? Que pueda dormir.