Si alguna cosa está quedando clara en la XIX Cumbre Iberoamericana de Estoril es que el futuro de Manuel Zelaya es cada vez más oscuro y sus posibilidades de volver, de manera permanente, a la presidencia de Honduras, prácticamente nulas. La mayoría de los países, de una u otra manera, creen que las elecciones celebradas el domingo en Honduras han abierto una «nueva situación» que no puede dejar de ser tenida en cuenta. Incluso Brasil, que lideraba la oposición más radical al reconocimiento de los comicios, y España, que secundaba la misma idea, apuestan por lo que podría ser una tercera vía ...