VALLADOLID-La Consejería de Sanidad abrirá, el próximo martes, una central de atención telefónica para dar respuestas a los ciudadanos castellanos y leoneses ante la gripe A/H1N1. Una medida, incluida dentro del Plan que lleva a cabo la Junta de Castilla y León, que prevé crear 16 puestos, con sesenta personas, con un presupuesto de dos millones de euros.
De este modo, aquellas personas que deseen obtener información o demanda asistencial, podrán ponerse en contacto con el número gratuito 900 222 000. Allí, los profesionales que lo atienden decidirán si se descarta o no un proceso gripal. Si el paciente presenta síntomas de alarma, podrá recibir la visita de un sanitario y se determinará, según los síntomas, si debe o no ser trasladado al hospital más próximo. En caso de requerir atención por encontrarse mal, el paciente también podrá dirigirse al 112 de Emergencias.
Para efectuar esas inspecciones domiciliarias, explicó el consejero de Sanidad, Francisco Javier Álvarez Guisasola, se han adquirido 3.600 pulsioxímetros, de cara a que los médicos analicen el oxígeno en sangre periférica, uno de los síntomas que determina la afección o no del paciente por gripe A.
Orientación en internet
Por otra parte, el Gobierno regional ha desarrollado un espacio específico en internet, dentro del portal de Sanidad, sobre esta nueva gripe, en el que puede accederse a un simulador de diagnóstico y autoevaluación, en el que se da cumplida información sobre el virus y sus causas.
El objetivo, manifestó es «preservar el sistema sanitario general» y «no menoscabar el resto de prestaciones». En este contexto, manifestó que la preocupación en la sociedad es «lógica», si bien recomendó «acudir en principio a los centros de salud y menos aún a los hospitales», lo que provocaría colapso. En este contexto subrayó la «madurez y calidad» del sistema sanitario para hacer frente a esta situación nueva y se mostró «optimista, desde el punto de vista médico».
El Gobierno regional ha previsto también difundir 1,1 millones de trípticos, 475.000 folletos, 75.000 carteles y 5.000 póster.
El consejero de Sanidad se refirió igualmente, a la posibilidad de recurrir a personal sanitario jubilado y estudiantes de últimos cursos, en el caso de que la actividad fuese muy elevada. A su juicio, «habría que ver la disponibilidad del personal durante los picos de la gripe», si bien indicó que se reestructurarían horarios, permisos y vacaciones. Además, indicó que los hospitales, a partir de los planes provinciales que se han previsto, contemplan áreas previstas para pacientes afectados. Entre ellos, citó, el Río Hortega de Valladolid, Los Montalvos de Salamanca y el Militar de Burgos.
Por otra parte, indicó que la población diana, con los grupos de riesgo clínico y los sociales, además de los escolares, serán vacunados en cuanto se disponga del fármaco correspondiente, toda vez que la campaña de gripe estacional se adelantará a finales del próximo mes, de cara a una mejor organización interna.
El consejero aseguró que «estaría encantado de que se pudiese vacunar a la población a principios de noviembre», si bien matizó que «el problema está en que la vacuna sea segura, y en eso seconcentran los laboratorios productores».
Con respecto a las acciones en centros escolares, se informará cumplidamente a los responsables docentes de cada uno de ellos.
Álvarez Guisasola, quien recalcó que el 80 por ciento de casos tienen una evolución favorable y domiciliaria, incidió además en que «cualquier niño con síntomas de padecerla no debe ir al colegio, por el posible contagio».
Sobre la posibilidad de clausurar centros, dijo que «podría ocurrir excepcionalmente que se cerrase alguna clase o escuela», si bien recalcó que Educación desarrollará un control de asistencia para aplicar medidas.