- jueves 18 abril 2024
Establecen que sólo un 20% de la prima sea recibida en metálico y al contado
Los supervisores europeos acordaron ayer acotar las primas de los ejecutivos de la banca para evitar que asuman riesgos excesivos con tal de lograr grandes beneficios. A partir del 1 de enero, sólo el 20% de la prima podrá ser recibida en metálico y al contado, según las conclusiones del Comité Europeo de Supervisores Bancarios (CEBS, por sus siglas en inglés). El resto, según las directrices aprobadas por el organismo que agrupa a los bancos centrales, como el Banco de España, llegará en forma de acciones o pagos en un periodo no inferior a tres años. Con esta medida, el CEBS pretende poner fin a una de las prácticas más habituales durante los años previos a la crisis: la búsqueda del dinero fácil y rápido para lucrarse sin importar las consecuencias.
Los cinco mayores bancos de Reino Unido, Barclays, HSBC, Lloyds, RBS y Standards Chartered aceptaron hoy las limitaciones a los bonus de los directivos de banca recomendadas en el marco del acuerdo alcanzado en el G-20 durante la semana pasada, según anunció hoy el ministro del Tesoro británico, Alistair Darling.
Darling señaló que estos cinco bancos son los primeros a nivel mundial en aceptar estas condiciones, y se mostró esperanzado en que se siente un precedente a imitar por el resto de entidades mundiales.
Los cambios que incluyen en el acuerdo del G-20 no limita las primas a los ejecutivos bancarios, pero sí obliga a que las entidades revelen todas las retribuciones de sus directivos. Según el consenso alcanzado en el encuentro celebrado la semana pasada en Pittsburgh, el reparto de primas desmesuradas es considerado como un riesgo para la estabilidad financiera, ya que alienta a los inversores a tomar riesgos excesivos.
Los cinco bancos emitieron un comunicado conjunto en el que consideran "esencial" que la recompensa bancaria sea compatible "con una gestión eficaz de los riesgos" y confirman su voluntad de adherirse a las nuevas normas de remuneración anunciadas el pasado mes de agosto por el regulador bursátil británico, la Financial Services Authority (FSA), que entrarán en vigor el próximo 1 de enero, en línea con el acuerdo del G-20.
Se da la circunstancia de que de los cinco bancos que han aceptado las limitaciones de sus bonos, tres no han necesitado de ayudas gubernamentales para subsistir durante la crisis financiera, Barclays, HSBC y Standard Chartered.