El Parlamento ha decidido apretarse el cinturón y ha acordado bajar un 11 por ciento su presupuesto para 2010, con reducciones tanto en las cuentas de las Cortes Generales -que incluyen al Defensor del Pueblo y la Junta Electoral Central- como en los presupuestos específicos del Congreso y el Senado.
Así, el Parlamento contará con un total de 214.588.810 euros para el año próximo, cifra que comparada con el ejercicio anterior supone una bajada cercana al once por ciento, puesto que los presupuestos para 2009 contemplaban una partida de 239.109.426 euros.
Concretamente, las Cortes Generales dispondrán el año próximo de 57.273.490 euros -un 5,02 por ciento menos que en 2009-, según acordaron ayer las Mesas del Congreso y del Senado reunidas en sesión conjunta.
Por su parte, las Mesas del Congreso y del Senado, reunidas hoy por separado en sus respectivas Cámaras, han acordado también seguir la misma línea de austeridad y también reducirán sus cuentas para 2010, además de congelar -un año más- los sueldos de diputados y senadores.
El Congreso afrontará el ejercicio de 2010 con 98.198.040,54 euros, lo que supone un 1,09 por ciento menos que este año, recorte que se ha realizado mediante la contención de los gastos corrientes, ha informado la Cámara Baja en una nota oficial.
Se ha aprobado asimismo la congelación salarial de los diputados por segundo año consecutivo, y también los sueldos del personal que trabaja para el Congreso.