Opinión
Reconozco que durante gran parte de mi vida yo también pertenecí al bando contrario. Consecuencia obligatoria de mi educación informática, supongo. Me crié entre PC's, con un DR-DOS bajo el brazo, discos de arranque y con la ferviente idea de que un ratón era una pijotada sin sentido en el mundo de los ordenadores de verdad. ¿Macintosh? Una bobada con la que timaban a inútiles sin puñetera idea de escribir un comando, reducto elitista de tres diseñadores con ínfulas. Los informáticos de verdad utilizaban PC's, lo de Apple era para 'artistas' y demás gente de mal vivir.