Opinión
Llevo mucho sin escribir en este espacio. Demasiado. Pero los pocos fieles que me queden deberán perdonar que en mi retorno no me esfuerce en denunciar nuevas cacicadas, innumerables maldades, ni dedique mil y un epítetos a mi admirado y nunca siempre lo suficientemente denostado presidente Vivas. No, hoy toca algo distinto. Acabo de escuchar en La Linterna de la Cadena Cope a una de las personas que seguramente más influencia han tenido de forma indirecta sobre mi educación, a uno de los hombres ajenos a mi circulo familiar y más cercano que más ha tenido que ver para que llegue a ser lo que todavía no estoy muy seguro si soy. A un genio, a un maestro. Acabo de escuchar en la radio a José Luis Garci, y no tengo más remedio que postrarme de rodillas y decir gracias. No, no decir, suplicar gracias. Gracias, señor Garci.Gracias por todo, señor Garci.