- jueves 25 abril 2024
El día después de ser coronado ganador del Balón de Oro y mejor futbolista del planeta por la revista France Football con la mayor diferencia de la historia, Leo Messi empezó de suplente en un banquillo de lujo junto con Andrés Iniesta y Zlatan Ibrahimovic. Los tres hicieron acto de presencia tras el descanso cuando el Barça ya mandaba después del testarazo de Thierry Henry. El trío de suplentes finalizó el partido arriba y fue entonces cuando se vieron las mejores gotas de calidad. Las combinaciones entre Ibra, Messi e Iniesta dieron pie a un aluvión de ocasiones con la guinda final del 0-2 que sentenció la victoria azulgrana en Jerez.
Por mucho que un comentarista del canal TV4 de Suecia intoxicara durante la transmisión del clásico contra el Barça que Zlatan y Leo no se hablan fuera del terreno de juego y no tienen relación alguna, lo absolutamente cierto es que entre ellos sí hay 'feeling' y del bueno. Lo han demostrado a lo largo de la temporada tanto en los partidos como bromeando en los entrenamientos y volvieron a hacerlo en la acción del segundo tanto. El argentino, consciente de que el Balón de Oro sólo se gana con el apoyo de los compañeros, sirvió una majestuosa asistencia al hueco que Ibra se encargó de traducir en gol con una preciosa vaselina que superó la salida del guardameta Renan. Menudo puntapié al mal rollo. ¿Qué debieron decir ayer en Suecia? ¿Acusaron otra vez a Leo de egoísta y de no pasarle el balón al '9' azulgrana?
Si hubiera enemistad, seguramente Messi hubiera probado suerte con una internada en solitario, que facultades tiene para ello. Y eso que el '10' venía de rematar al poste de Renan y ver cómo el gol se le negaba otra vez tras el paradón de Casillas en el tramo final del clásico. Pero no fue el caso, como tampoco en Santander y Málaga, donde sendos envíos de Leo a Ibra acabaron en el primer gol barcelonista. Con la de ayer, ya son tres las asistencias del rosarino al sueco, que alcanzó la decena de 'dianas' en lo que va de temporada y ya está a uno de los 11 que suman Messi y Pedrito. Guardiola apostó por las rotaciones pero cuando coincidieron cuatro (Leo, Xavi, Iniesta e Ibra) de los siete primeros del Balón de Oro, se vio por fin en ataque al Barça de verdad. Y en ese equipazo no hay ni habrá malos rollos