Entrenamientos privados en Chicago, trabajo con su preparador físico de confianza. La década comenzó con el sobresalto planetario ante la posible vuelta de Michael Jordan al baloncesto. El deseo de muchos se hizo realidad cuando el mejor jugador de la historia volvió a la NBA con 38 años para dar una última clase magistral a la nueva generación. Su aventura en Washington Wizards duró dos temporadas. La liga americana tenía aún otro aliciente: Pau Gasol se convirtió en el segundo español, tras Fernando Martín, en disputar la competición profesional. Fue elegido por Atlanta Hawks en el número 3 del draft y luego traspasado a Memphis Grizzlies. Antes de dejar el baloncesto europeo, dominó a su antojo la competición española siendo MVP de la Liga ACB y de la Copa del Rey.

La propuesta de LeBron James  de que la NBA haga retirar el número 23 de Michael Jordan en su honor ha chocado de forma directa con la Liga que ha salido al paso de los rumores y recuerda que la retirada de números es una decisión exclusiva de los equipos.

LeBron insinuó que quería cambiar el número como un homenaje a Michael Jordan y pedía al resto de equipos que hicieran lo mismo. Mientras la NBA no parece ser partidario de estas decisiones, la Major League de Beisbol retiró el 42 de Jackie Robinson y la NHL hizo lo propio con el 99 de Wayne Gretzky.

[+] PARTICIPACIÓN MD: ¿Qué debería hacer la NBA?

La decisión de Marcus Jordan, hijo de Michael Jordan, de disputar el último amistoso de su equipo, Central Florida University, calzado con unas zapatillas Nike en lugar de unas Adidas ha provocado que la marca alemana dé por roto el contrato que tenía con esta universidad. Adidas y Central Florida acababan de llegar a un acuerdo para extender su compromiso por cinco años más (hasta 2015) a cambio de 3 millones de dólares en material deportivo.

Marcus Jordan, que inicia ahora su carrera universitaria (freshman), había solicitado jugar con unas Nike Air Jordan por lealtad a la marca mítica de su padre, algo que en principio su universidad negoció con éxito con los representantes regionales de Adidas. Posteriormente la alta dirección de Adidas dio marcha atrás.

El hijo de Jordan jugó el miércoles el amistoso contra Saint Leo con unas Nike Air Jordan blancas y sin logotipo alguno. Su equipo ganó por 84-65 pero Marcus se quedó en un punto y su universidad perdió 3 millones