En el día de hoy, inspirado aún en el espíritu de las recientemente finalizadas fiestas navideñas, reflexionaré en relación a los resultados altamente satisfactorios obtenidos como consecuencia directa de las relaciones leales existentes entre la Administración Autonómica y la Administración General del Estado es decir, entre el Ejecutivo local presidido por Juan Jesús Vivas y el Ejecutivo de la nación, representado en nuestra ciudad por el Delegado del Gobierno, José Fernández Chacón. Circunstancia duramente criticada por aquellas formaciones políticas obstinadas en anteponer sus intereses partidistas a los intereses generales de la ciudadanía obviando incluso, la necesidad imperiosa de trabajar desde el compromiso en la mejora de una convivencia efectiva entre las diferentes culturas que se integran en la sociedad ceutí.
Las últimas semanas han significado al recrudecimiento en las acusaciones provenientes principalmente de la coalición recientemente constituida Caballas contra la excelente labor conjunta desarrollada en los últimos años por las dos administraciones públicas existentes en la ciudad en beneficio de una ciudadanía, que padece las carencias lógicas de nuestra ubicación geográfica. Líderes insolidarios, que incluso no han dudado en criticar las visitas a nuestra ciudad por primera vez en nuestra historia democrática tanto, del responsable europeo de Política Regional, el comisario europeo, Pawel Samecki como, de los parlamentarios nacionales encuadrados en la comisión mixta Congreso-Senado para asuntos de la Unión Europea, presidida por el ex ministro popular, Miguel Arias Cañete.
Por tanto, los ceutíes debemos valorar objetivamente la labor desarrollada por ambas instituciones al promover la visita a nuestra ciudad de los máximos responsables políticos en la toma de decisiones, que podrían significar un cambio sustancial en nuestras relaciones con la Unión Europea puesto que, el primero es el máximo responsable europeo en la gestión de todos los fondos generados por la Unión Europea y la segunda, constituye la máxima representación parlamentaria en las relaciones bilaterales entre nuestras instituciones y el Parlamento Europeo. Circunstancia, que podría significar para nuestra ciudad el reconocimiento tácito de nuestras especificidades alcanzando con ello, un tratamiento equiparable al de región ultraperiférica.
Debo recordar a nuestros lectores, que este reconocimiento supondría para Ceuta adquirir una serie de privilegios que permitirían hacer frente a las dificultades inherentes de nuestra situación geográfica a través, del desarrollo de estrategias en términos de accesibilidad, competitividad y de inserción regional. A partir de ese momento, nuestra ubicación dejaría de ser un déficit para convertirse en un superávit puesto que, favorecería las nuevas estrategias en materia de lucha contra los tráficos ilegales y de la cooperación policial así mismo, nos convertiríamos en un territorio adecuado para la investigación científica y la adaptación al cambio climático, energías renovables, conservación de la biodiversidad y del medio marino.
En definitiva, pese a las duras críticas recibidas, solo puedo afirmar, que el acercamiento leal fomentado por el Presidente de todos los ceutíes, Juan Jesús Vivas y la respuesta favorable del máximo representante gubernamental, José Fernández Chacón, ha propiciando importantes beneficios en los últimos años a una ciudadanía necesitada de esta cooperación. Ahora, los ceutíes tenemos la oportunidad de conocer los resultados satisfactorios alcanzados tras horas y horas de reuniones entre los máximos representantes gubernamentales.
