El coche hallado cerca de la frontera y que un principio la policía sospechó que podía contener explosivos tenía en su maletero una sustancia refrigerante, según informaron fuentes policiales marroquíes. El vehículo, que despertó las sospechas de las fuerzas de seguridad marroquíes, había sido trasladado a una zona aislada en un bosque que dista unos dos kilómetros de la frontera de Ceuta, donde fue minuciosamente registrado por artificieros de la policía. Tras examinar el coche con perros especializados en explosivos, los agentes hallaron varios cajas en el maletero con una sustancia líquida que despertó las sospechas por el fuerte olor que desprendía. Según las fuentes, la sustancia es un líquido empleado como refrigerante en aparatos de aire acondicionado. Aun así, la policía científica marroquí continúa registrando el coche, que todavía no ha sido retirado de la zona.
