mamporros

A mamporros

El Gobierno sigue a mamporros con los representantes de los empresarios. Si alguien piensa todavía que Zapatero olvida y perdona, está muy equivocado. Para demostrarlo, basta contemplar la escabechina que ha preparado entre los mandamases socialistas durante los últimos años. Sus actuaciones han provocado que, en la última reunión del máximo organismo entre congresos del PSOE, que se celebró el pasado fin de semana, se pusiesen todos «prietas las filas» en público y se registrase una defensa cerrada del líder, aunque en privado la cosa cambia mucho. Viene todo lo anterior a cuenta de que el presidente del Gobierno ni ha olvidado ni ha perdonado lo que consideró un desplante por parte del representante de los empresarios a finales de julio. Después de un periodo en el que parecía que reinaba la calma y una cierta armonía entre el Ejecutivo y la cúpula empresarial, la teórica vicepresidenta económica (el que manda de verdad es Cándido Méndez) ha vuelto a desatar las hostilidades contra los patronos, a los que ha arreado a base de bien.
Aplicando el sentido común, no parece que esta táctica sea la más adecuada para salir de la crisis. Incluso suponiendo que el Gobierno tuviese razón, lo que es mucho suponer, está claro que los que crean empleo son los empresarios. Por eso, se quiera, o no, el Gobierno debe contar con ellos, escuchar sus propuestas y ver lo que se puede hacer. Desde luego, lo que no procede es liarse a mamporros. Pero ya se sabe, insisto, que Zapatero ni olvida ni perdona, y aquellos de CEOE que habían decidido bajar la guardia, porque las cosas habían «cambiado», se han equivocado de principio a fin. Y dejo para otro día la última ocurrencia de Salgado, que no ha sido otra que decir que la subida de impuestos afectará a los trabajadores, pero «para su beneficio». Ya, ya. De momento, si sube el IVA, tendrán que pagar más, como todos. Ya veremos si luego se lo devuelven.
 

Entrando en la página solicitada Saltar publicidad