- viernes 29 marzo 2024
El Sánchez Pizjuán es un estadio caliente. En octubre de 1999, en un derbi ante el Betis, el árbitro encontró un cuchillo en el césped. El Sevilla fue sancionado con cuatro partidos, pero, tras varios recursos, se redujo a uno. En octubre de 2002, un joven aficionado (17 años) la emprendió a golpes con una muleta contra un vigilante de seguridad en uno de los fondos. El campo fue clausurado cuatro partidos y el agresor, condenado a siete meses de internamiento en un centro de menores.