Nayat Kaanache recibe el Premio Convivencia llamando a la hermandad
“Me niego a aceptar que la humanidad está trágicamente ligada a la medianoche sin estrellas del racismo y la guerra"
“Me niego a aceptar que la humanidad está trágicamente ligada a la medianoche sin estrellas del racismo y la guerra"
Comenzó en Holanda repartiendo ‘pintxos’ vasco-marroquíes en bicicleta. Hoy, tras aprender con los mejores cocineros del mundo, regenta el mejor restaurante de África sin olvidar el espíritu que la he llevado hasta aquí: respeto por el cliente, por el producto y por los productores. Este viernes recoge el Premio Convivencia por su ejemplo emprendedor y su labor activista por el empoderamiento de la mujer.