Opinión
Miente más que parpadea
La intervención de nuestro Alcalde en el debate del pasado jueves debe ser considerada sin duda como épica, sí pero en todos los sentidos, pues decir tantas mentiras en un espacio tan corto de tiempo, tiene que ser a la fuerza calificado como una verdadera gesta digna de ser cantada por juglares. En cualquier caso la realidad es otra y es que no por mucho repetir esas mentiras, estas se van a convertir en verdad, aunque él así lo crea, sobre todo estando tan acostumbrado a ver como sus cortesanos si que se las tragan, especialmente si con eso consiguen que los coloquen al frente de cualquier institución o empresa municipal, con unos sueldos y privilegios a los que, por capacidad y esfuerzo, difícilmente podrían aspirar.