El italiano se llevó por delante a Lorenzo al intentar adelantar en la primera vuelta; el español pudo volver a la pista y acabó sexto. El estadounidense Spies gana su primera carrera en la máxima categoría
El parte de siniestros de Marco Simoncelli acumula un nuevo incidente después de la carrera de Assen. Su lista de excesos se ha convertido en factor determinante en el anuario de la temporada. La colada de Le Mans tachó a Dani Pedrosa de los candidatos al título. Ayer la volvió a liar. Se llevó por delante a Jorge Lorenzo en la primera curva a izquierda de la carrera. Una maniobra legal, pero innecesaria con el tráfico todavía intenso de la vuelta inicial y con el neumático sin la temperatura ni el agarre suficiente para respaldar su pasada al campeón del mundo.
Marco Simoncelli ha añadido un episodio más al duelo entre Italia y España en el Mundial de Motociclismo. Tras el toque de Andrea Iannone en Indianapolis con Pol Espargaró, ahora es Marco Simoncelli, que ha tenido más de un roce ya con los pilotos españoles, el que pone más leña al fuego.
El vigente campeón del mundo de 250 cc, que el pasado fin de semana corrió en Superbikes se despacha a gusto con Barberá y Bautista de los que dice que "no se merecen que les de la mano". En declaraciones al Corriere dello Sport, Simoncelli afirma que "la atmosfera en Superbikes es mejor y más deportiva, el domingo tuvimos algún adelantamiento al límite pero al final no había quejas. En 250 cc el ambiente ha empeorado".
El italiano Marco Simoncelli (Gilera) supo imponerse al resto de competidores desde el primero hasta el último minuto de los entrenamientos oficiales del Gran Premio de Alemania de 250 c.c., también pasados por agua. Nada más abrirse el semáforo para que los pilotos pudiesen entrar en pista fue el checo Karel Abraham (Aprilia), quien por la mañana ya había dado muestras de rodar muy bien en agua, el que primero se puso al frente de la tabla de tiempos, pero tras él lo hizo, casi de inmediato, el vigente campeón del mundo, Marco Simoncelli, quien ya no abandono esa posición hasta la bajada de la bandera de cuadros.
Y eso que el español Héctor Barberá (Aprilia) lo intentó con todas sus ganas y por apenas unas décima de segundo no pudo desbancar al transalpino del primer puesto, que ya había conseguido en el último gran premio disputado hasta la fecha, el de Holanda. Por entonces, al principio de la sesión de pruebas oficiales, el mejor español seguía siendo Héctor Barberá, quien se mostró muy cómodo en tan malas condiciones climatológicas, mientras que a Álvaro Bautista (Aprilia), Álex Debón (Aprilia) o Héctor Faubel (Honda) les costó bastante más poder estar en las posiciones de cabeza de la clasificación.
En el caso de Álvaro Bautista intentó cambiar algunas cosas en la puesta a punto de su Aprilia con respecto a lo que ya conocían del pasado año, pero esas modificaciones no se mostraron demasiado acertadas y tuvo que deshacer el camino andado hasta ese momento para lograr como mal menor la tercera plaza. En los últimos minutos Héctor Barberá forzó el ritmo para intentar doblegar a Simoncelli y, de hecho, en los dos primeros parciales su paso era más rápido que el del italiano, pero no consiguió esa continuidad en la última parte del recorrido y, al final, se tuvo que conformar con la segunda plaza, que desde luego no le gustó nada, pues se bajó de la moto bastante disgustado.
Y, mientras Barberá intentaba acercarse a su rival, éste hacía todo lo contrario, buscó alejarse arañando algunas milésimas de segundo que le acabaron situando como el mejor de la formación de salida pero a escasamente una décima de segundo y con todos sus rivales de la categoría, Álvaro Bautista y el japonés Hiroshi Aoyama (Honda), en la primera línea. En la segunda línea acabó clasificado Álex Debon (Aprilia), que realizó el séptimo mejor tiempo, justo por delante de Héctor Faubel, quien aprovechó las adversas condiciones climatológicas para sacar el máximo potencial posible de su Honda.
