Mohamed Alí lo dejó bien claro en su rueda de prensa de ayer. La situación denunciada por UDCE-IU era un “escándalo” y los responsables políticos no hicieron nada pese a estar al tanto de la presunta irregularidad. En sus palabras, Alí se refirió en varias ocasiones a la por entonces viceconsejera de Recursos Humanos y ahora asesora de Servicios Sociales, Adelaida Álvarez. La propia afectada prefirió ayer no hacer declaraciones y dejar que la Fiscalía hable si UDCE-IU presenta la denuncia, segura de su inocencia. Una postura que corroboraron otras fuentes de la Ciudad consultadas por Ceuta al día, que confirmaban que desde la Viceconsejería se dieron todos los pasos conforme a la legislación, con el objetivo de acabar con una situación irregular. Y es que parte de la defensa de Adelaida Álvarez la dio ayer el propio Mohamed Alí, que enarbolaba como muestra de la complicidad del Gobierno del PP el decreto que la viceconsejera firmó poco antes de abandonar el cargo, en el que instaba a dejar de ingresar el pago indebido a los funcionarios afectados, además de solicitar un informe “por escrito y urgente” de los motivos por los que no se obedeció el escrito de 21 de septiembre de 2006.