Los servicios jurídicos del Gobierno de la Ciudad buscan la forma legal de deshacerse de la empresa Hércules Servicios Integrales, concesionaria de varios contratos del ICD y envuelta en conflictos laborales por impago a sus trabajadores desde el pasado mes de agosto. Una situación que este jueves a punto estuvo de terminar en tragedia con el encierro de una trabajadora a quien se le adeudan dos mensualidades y una paga extra, que amenazaba con inmolarse en el Conservatorio, instalaciones en las que trabaja como limpiadora subcontratada por Hércules. 

Pero no es sencillo, advierte el portavoz del Ejecutivo, Alberto Gaitán. "La Ciudad Autónoma está al corriente de pago con la empresa Hércules, que está prestando servicios a la Ciudad y como ya hemos dicho en ocasiones anteriores, los servicios jurídicos y de contratación de la ciudad están analizando las opciones posibles dentro de la normativa aplicable para adoptar medidas al respecto contra la empresa. Son unos cauces muy complejos desde el punto de vista normativo  para una rescisión de contrato”, ha alegado Gaitán en un tono neutro, esquivando como es habitual un juicio politizo más profundo. 

"Lamentamos los hechos ocurridos ayer y lamentamos también la situación que está viviendo la plantilla de Hércules”, ha zanjado. “En cuanto al retraso del pago de sus nóminas, estamos en contacto con la plantilla con los representantes de los trabajadores. “Estamos trabajando con la empresa para que abone los salarios a los trabajadores, hemos intensificado los pagos de la empresa para que no existe ninguna deuda por parte de la ciudad con ella y estamos también en contacto con los trabajadores del sindicato para ayudarles en todo lo que podamos y ahora queda la parte jurídica para adoptar medidas, qué es lo que se está analizando”.