El auto que cierra la instrucción del 'caso Emvicesa' estima que "procede proceder" contra el ex gerente del PP, después asesor de Vivas hasta que le cesó, José María González Barceló, por "un delito de tráfico de influencias" ya que "utilizaba su relación con el partido político en el que ostenta el cargo de gerente (Partido Popular) para  conseguir de Antonio López una vivienda de protección oficial, dado que el investigado era conocedor de que entregaba las casas a cambio de dinero o fuera de todo proceso legal".

"De hecho confiesa saber que una persona le contó que había entregado 3.000 euros para comprar una casa y no lo denunció", añade la magistrada, que explica que "consta en las actuaciones que dirigía a personas para que fueran recibidas por López para que éste le diera una casa".

La fórmula era "solicitarle el DNI y la tarjeta de ser demandante de vivienda" para dárselas a López, con quien mantenía "contactos telefónicos", como con algunos de sus 2captadores", que "cesaron tras la publicación de la 'lista fantasma".

"Tampoco es creíble que lo hiciera de buena fe o preocupado por los problemas de acceso a la vivienda de los ciudadanos de Ceuta porque no era su función, no lo hacía con todo el mundo y, desde luego, ya no volvió a preocuparle dicha cuestión porque tras el cese de Antonio López no hizo la misma labor altruista con la nueva gerente, Kissy Chandiramani", completa.

Además, "confirmando el delito de tráfico de influencias contamos con las conversaciones telefónicas (que no han sido pocas) en las que el propio investigado confirma que entregó una lista de personas para que Antonio López les entregara una casa".