Los jugadores de la Asociación Deportiva Ceuta se han retirado del terreno de juego bajo una pitada de su afición. Un enfado que el técnico local, Andoni Goikoetxea, entiende. "La afición es soberana, y con una derrota no puede estar contenta. Yo tampoco estoy satisfecho. Si me preguntan diría que estoy jodido, estoy superjodido", ha señalado el entrenador, que ha reconocido el mal juego de su equipo en el Murube.

"Ha sido un partido malo, no sé si por culpa del viento, con muchas pérdidas, impresiciones", ha señalado Goikoetxea, que cree que su equipo se ha venido abajo tras fallar el penalti. De cara al futuro, el entrenador cree que su plantilla se recuperará pronto del mazazo, "es gente joven, como un corcho, que sale pronto a flote", y asegura que todavía "hay vida" y puntos por delante para luchar por el ascenso. Quince, según ha repetido el técnico hasta en dos ocasiones, aunque lo cierto es que al Ceuta tan sólo le quedan doce puntos por disputar, correspondiente a las cuatro jornadas restantes.

Por su parte, el visitante 'Nene' Montero cree que su equipo ha jugado un partido serio, cortando las líneas de salida de juego del Ceuta, y que se merecía quizás algo más que un empate frente a los caballas. Los locales no han gustado al entrenador del Estepona, que reconoce que en el pasado ha visto "muy buenos Ceuta" pero que el de hoy "no ha estado a la altura de otros años". Montero reconoce que el Ceuta es un equipo "muy compensado", con jugadores peligrosos, "un grande de la categoría" pero que en este partido "o no les hemos dejado o no han podido sacar todo su potencial". 

También ha destacado la labor del ceutí que milita en las filas del Estepona, Borja Gil, un jugador que apenas había contado con minutos hasta su llegado al banquillo, y que para Montero es un derroche de esfuerzo, criterio con el balón y capacidad de sacrificio.