Los empleados están "al borde del colapso nervioso o de la baja psicológica" según afirma el sindicato, que asegura que voluntariamente la plantilla abre las puertas al público media hora antes cada mañana para poder descongestionar las grandes colas que se forman cada día. Además de la atención al público, los funcionarios deben tramitir los expedientes, dos actividades para las que no hay suficiente tiempo según denuncia el sindicato.
Comisiones Obreras asegura que en el sindicato se reciben quejas al respecto "a diario" por lo que no comprenden que ante esta grave situación no se haya tomado todavía medidas para buscar una solución, como pudiera ser la contratación de personal eventual hasta que se amplíe la plantilla con el número adecuado de trabajadores que puedan hacer frente el elevado caudal de trabajo que recibe la oficina a diario.
La situación del Inem se ha agravado incluso más en los últimos días con la llegada de los más de 700 trabajadores del Plan de Empleo que han pasado también al paro en el último mes, llegando el número de desempleados a 7.409.