El Centro Integrado del Brull ha iniciado su andadura. Los primeros pasos de este proyecto, una de las grandes apuestas de la Ciudad y el Ministerio de Educación y FP, son todavía por los vericuetos de la Administración. La licitación del proyecto arrancó este viernes con el nuncio oficial del concurso para la adjudicación de las obras del macro centro escolar por un montante total de  18.240.461,58 euros y un plazo de ejecución de 36 meses.

El Centro Integrado del Brull, con seis unidades de Infantil, 12  de Primaria, 16 de Secundaria y 6 de Bachillerato, cambiará radicalmente la imagen del enorme solar de la calle Cortadura del Valle (Solar del Brull), en Ceuta. Un enorme espacio con arbolado que ha permanecido abandonado durante décadas y de cuyo pasado castrense —fue cuartel y panadería militar— aun quedan restos. En 2011, el Ministerio de Defensa vendió a la Ciudad esta jugosa parcela por 5 millones de euros para construir 450 VPO para rentas bajas a través de la iniciativa privada, proyecto que quedó en nada. Un año después, el Gobierno anunció en Pleno que tenía un Plan Estratégico para el Desarrollo Económico de Ceuta”, donde se incluía la zona del Acuartelamiento de El Brull para “nuevos equipamientos comerciales”,  entre ellos un hipermercado de Mercadona que por aquel entonces aún no había desembarcado en la Ciudad. Pero pronto quedó también en el olvido.

Hubo que esperar cinco años más, hasta marzo de 2017, para que el solar del Brull tuviera destino definitivo: un centro educativo. Y aunque inicialmente se barajó tan solo un Instituto de Educación Secundaria, finalmente, el Brull será un centro integrado con Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato.

Las obras, que tienen un plazo de ejecución treinta y seis meses, consisten en la construcción de un nuevo complejo educativo en la Ciudad de Ceuta para alumnos desde infantil hasta bachillerato. La parcela cuenta con restos de las antiguas construcciones pertenecientes al acuartelamiento del Brull, así como restos arqueológicos de las sucesivas campañas de trabajos de excavación y documentación, conservando la estructura principal de dichos restos a integrar en el diseño del edificio y garantizando que durante el proceso de construcción se preservará para su puesta en valor. 

Respecto a la inversión de más de 18,2 millones, 4,5 se destinarán a la primera fase de la obra, en 2023, 6 millones por cada anualidad en 2024 y 2025 y el 1,7 restante para 2026.