El Gobierno de la Ciudad Autónoma que preside Juan Vivas lleva unas semanas asombrado por el escaso número de solicitudes de plazas en guarderías que ha recibido para el año académico 2010-2011, en el que entrará en funcionamiento la nueva Escuela Infantil de Juan XXIII, un controvertido proyecto que a ojos de la coalición Caballas es directamente “ilegal” por estar emplazado en un inmueble que se dedica también a otros usos, en concreto el residencial.

Si hace doce meses fueron 718 las peticiones de plaza recibidas y hubo que desestimar más de la mitad por no disponer de suficientes huecos para atenderlas, este año las solicitudes registradas no llegan ni para cubrir las vacantes públicas existentes (además se ofrecen noventa plazas más en régimen concertado).

En el Ejecutivo se tiene la sensación de que el fenómeno sólo responde a la dejadez del ciudadano a la hora de atender este tipo de plazos. En la oposición se está más cerca de pensar que las familias, escamadas por experiencias anteriores, se buscan la vida con amigos o familiares o renuncian a oportunidades laborales, en caso de haberlas, para poder atender adecuadamente a sus vástagos.

El PP concurrió con Juan Vivas a la cabeza de su lista a las elecciones autonómicas de 2007 con el compromiso explícito de “doblar” el número de plazas de guardería existentes en Ceuta. Cuatro años después, el cambio más notorio que se ha registrado en este ámbito ha sido el cierre de la que había en la Residencia Nuestra Señora de África, en San José-Hadu, y su traslado al Amor Fraterno.

Sin embargo, dos meses antes de las próximas elecciones, el Gobierno del PP ha apretado el paso y, el pasado jueves, ha presentado un ‘Plan estratégico de centros de Educación Infantil’ con el que aspira a dotar a la ciudad autónoma de 613 plazas más para alumnos de 0 a 3 años susceptibles de acoger también a pequeños con 4 ó 5 años.

Dicho proyecto incluye la ejecución del proyecto de Juan XXIII, que debe estar terminado este mes de junio y abierto en septiembre; la ampliación del Amor Fraterno y la construcción de dos nuevos inmuebles: uno en Loma Colmenar y otro en el mismo espacio donde estaba la guardería clausurada. Estas dos últimas infraestructuras (presupuestadas en 1,5 millones de euros cada una, con un plazo de ejecución de nueve meses y una capacidad de alrededor de 200 plazas) estarán abiertas, se espera, en el curso 2012-2013.

“El Gobierno del Partido Popular”, rebate las promesas del PP el líder de la oposición en la Asamblea, Mohamed Ali, “lleva diez años en el Ejecutivo ceutí prometiendo lo mismo y recibiendo millones de euros de las arcas de la Administración General del Estado para ese mismo objetivo, pero la única realidad es que Ceuta tiene hoy las mismas plazas de guardería que hace diez años y que uno de los edificios públicos ha habido que cerrarlo y trasladar a los niños a un espacio improvisado”.

No es tanto así: la Ciudad ha ampliado en 25 plazas las existentes en Juan XXIII y en 40 las disponibles en el Amor Fraterno (en Nuestra Señora de África había 90 plazas y en la alquilada 130). Según los planes del Ejecutivo, el año académico la oferta crecerá exponencialmente hasta 980 plazas, quedando cubierta “de sobra” la demanda registrada durante los últimos años. Además, Vivas prevé que se puedan crear 100 empleos directos a razón de uno por cada ocho alumnos.

Escuela Infantil “ilegal”

No sólo eso. Además, la coalición Caballas denuncia que el Gobierno pretende vulnerar la legislación vigente con proyectos como el de Juan XXIII. Según su interpretación de la Orden del Ministerio de Educación que regula los requisitos que han de cumplir los centros que impartan el primer ciclo de la Educación Infantil en las ciudades autónomas, esta deja bien claro que “los locales deberán situarse en edificios con acceso directo e independiente desde el exterior y uso exclusivo educativo en horario escolar, y alejados de actividades que puedan suponer un peligro para la salud”.

La portavoz del Ejecutivo ceutí, Yolanda Bel, replica a la oposición que no tienen razón alguna en sus denuncias y que el proyecto “cumple con la Ley”. El director provincial del Ministerio de Educación en Ceuta, Aquilino Melgar, responsable de la institución que en último término será el encargado de revisar el proyecto, dice desconocer todavía las características de la instalación.