Según comunica la Junta de Personal Docente "el profesorado de Ceuta se siente profundamente indignado ante los continuos actos y muestras de desprecio de los que son objeto por parte del Ministerio de Educación. Una actitud tan injustificada como incomprensible situada al límite de la falta de respeto. Los profesores y profesoras que impartimos docencia en Ceuta estamos hastiados de desarrollar nuestra labor en circunstancias muy adversas y en condiciones de inadmisible precariedad. Estamos cansados de pedir, de reivindicar, de explicar de todos los modos posibles que así no podemos seguir. Las elevadas cifras de fracaso escolar, que suponen una vergüenza pública, no son fruto de la casualidad, sino la consecuencia de una política educativa que los profesores denunciamos con reiterada insistencia sin que ello sea capaz de afectar a la sensibilidad de la administración".

Consideran que la única respuesta que han recibido ha sido el desprecio llevado al umbral del insulto. "Ceuta presenta una realidad educativa muy compleja, que requiere una revisión muy seria del sistema en su totalidad, y sobre todo, la aplicación de un conjunto de medidas, debidamente coordinadas que permitan atender con eficacia a una población escolar muy heterogénea y numerosa. Mientras otras comunidades autónomas, con competencias en materia educativa, han ido actualizando y modernizando la regulación de los aspectos básicos del sistema, Ceuta y Melilla, víctimas de un centralismo involuntario y extravagante, están ancladas en el pasado. No existen respuestas educativas en el ámbito pedagógico, funcional ni organizativo a múltiples fenómenos de nuevo cuño. Este hecho repercute de modo directo en problemas cotidianos en las aulas. Desde la carta de derechos y deberes de los alumnos, hasta los reglamentos de organización de los centros, pasando por la escolarización, son normas absolutamente obsoletas que, lejos de resolver, son fuente de infinidad de problemas. Nos encontramos privados de las herramientas esenciales para ejercer nuestro trabajo con dignidad. Las aulas están masificadas hasta el hacinamiento, en especial en el tramo de educación infantil. Las plantillas son insuficientes para aplicar con un mínimo de eficacia las medidas de apoyo pedagógico que permitan atender a todos los alumnos que precisan una atención individualizada".

"Nuestro trabajo se hace exasperante, frustrante. Nos sentimos impotentes", afirman los representantes del profesorado ceutí,  "Queremos impartir una enseñanza de calidad y sólo nos dejan pastorear alumnos y alumnos con relativo éxito. El delito que hemos cometido los profesores y profesoras de Ceuta, ha sido reivindicar la adopción de medidas que nos permitan salir de este injusto caos. Reivindicamos una política de construcciones escolares ajustada a las necesidades reales presentes y futuras, la reducción de la ratio, aumentos de plantillas para hacer frente a las demandas de nuestra población escolar; en definitiva, los elementos básicos de un sistema educativo moderno. Por este motivo, por desnudar sus vergüenzas, el Ministerio nos odia y ha decidido castigarnos. Los profesores de Ceuta somos los únicos que no tenemos derecho a negociar nuestras condiciones profesionales en una Mesa de Negociación. Este hecho propicia que los dirigentes ministeriales puedan abusar de su poder para manejar a su antojo, y siguiendo su propio interés, las relaciones laborales. Existen algunos datos objetivos demoledores. El acuerdo firmado en el año 2006, ¡hace ya cinco años!, sigue incumplido. El Ministro se comprometió a responder sobre sus intenciones en el mes de noviembre (se llamó a sí mismo un “hombre de palabra”). Aún estamos esperando. Quienes presumen cansinamente de progresistas y defensores de los derechos ciudadanos, no son capaces siquiera de cumplir con sus pactos".

A la falta de cumplimientos de acuerdos se suma la inexistencia de oposiciones, y el recorte de las plantillas "la sucesión de atropellos no tiene fin. Durante dos años seguidos han convocado oposiciones ridículas hurtando, en la práctica, el derecho de los profesores interinos, conquistado a través de la lucha sindical, a disfrutar de un sistema de acceso a la función pública más flexible. Este curso han recortado las plantillas de los centros, mientra se ha incrementado el número de alumnos en más de quinientos. Algunas de estas acciones son hirientes a fuerza de mezquines, como reinterpretar las normas para distraer algunos euros en las nóminas de interinos del verano. Los profesores, con sus sindicatos representativos a la cabeza, hemos venido dando muestras inequívocas de paciencia, moderación, prudencia y sentido de la responsabilidad que no se merece el Ministerio. Hemos procurado reconducir la situación confiado siempre en la negociación y en la buena fe de los responsables ministeriales. Pero el hecho cierto que siempre han respondido con un desprecio de mayor calibre que el anterior".

El pasado mes de abril se debía celebrar el Grupo de Trabajo de Ceuta y Melilla. El único órgano que tienen para negociar. Se trata de un “acuerdo entre partes” sin respaldo legal, de forma que nada en él tiene carácter vinculante. "El Ministro (el “hombre de palabra”), se había comprometido en noviembre a dotarlo de las características propias de una mesa de negociación. Incumplió. Así que siguen teniendo la posibilidad de actuar autoritariamente y sin más criterio que su capricho. La reunión se ha suspendido unilateralmente sin ninguna explicación. La reforma de la orden ministerial de interinidades ha entrado en vía muerte, la negociación de los cupos de profesores para el próximo curso no se producirá, el aumento de apoyos en educación infantil queda en suspenso".

"No conformes con esta burla, nos comunican, con infame regocijo que el único éxito alcanzado por la Dirección Provincial, la supresión de la Semana Blanca, se mantendrá para el próximo curso. No les ha bastado la demostración palpable de que su modelo de calendario, impuesto dictatorialmente contra toda la comunidad educativa, no sólo no ha aportado nada sino que ha generado una mayor frustración y desencanto. Se sienten bien azotando al profesorado. A ese mismo profesorado al que luego alaban cínicamente; el mismo sobre cuyo esfuerzo ellos sobrevuelan en helicóptero, pasean en moqueta y se hacen fotos de propaganda".

Los profesores y profesoras de Ceuta "hastiados e indignados" por la situación se concentrarán el martes a las 18,30 horas en las Murallas Reales, coincidiendo con el inicio de la Muestra de FP para "gritar al Ministerio lo que Ceuta demanda de ellos: más vergüenza y menos mentiras".