Las fuertes lluvias que siguen cayendo sobre Ceuta han provocado que la carretera que enlaza el centro de Ceuta con la frontera con Marruecos permanezca cerrada por precaución ante el riesgo de nuevos desprendimientos de tierra por la lluvia.

Según fuentes de la Delegación del Gobierno, la seguridad es el motivo fundamental de esta decisión que se ha adoptado hasta que en los próximos días comprueben la calzada unos especialistas en movimientos geofísicos de Andalucía. El tramo afectado, de unos 150 metros de longitud en la zona comprendida entre Juan XXIII y la Avenida San Juan de Dios, ha sido señalizado y balizado, habilitándose un desvío alternativo. El desprendimiento de tierra se produjo en la jornada del pasado viernes y no causó daños materiales ni personales debido a que en ese momento no había nadie transitando por la vía. Más lluvia en dos meses que la media anual de los últimos cincuenta años La persistencia de las precipitaciones desde finales del pasado año han hecho que la autonomía ceutí haya pasado de tener que contratar un barco-aljibe para traer agua desde Algeciras (Cádiz) como ocurrió en octubre de 2009 a tener que aliviar agua de los dos pantanos. En los meses de diciembre de 2009 y enero de 2010 los embalses han registrado una aportación de agua de 2,44 millones de metros cúbicos, el equivalente a 110 días de producción de la planta desalinizadora al cien por cien de actividad. En estos dos meses se ha registrado una pluviometría de 717 litros por metro cuadrado, lo que supone más del triple de la media de los últimos 50 años que se había situado en un total de 228 litros por metro cuadrado. Los dos pantanos -El Renegado y presa del Infierno- están al cien por cien de su capacidad desde hace varias semanas.