Una Magna Mariana para la historia
Trece vírgenes y un sinpecado han procesionado por primera vez en 600 años en Ceuta. Un hito histórico para la ciudad autónoma que se ha volcado con la Magna Mariana en honor a su Patrona, la Virgen de África en el 600 aniversario de la diócesis, con miles de ceutíes siguiendo el pasar de todas las imágenes marianas entre la Catedral y la plaza de la Constitución hasta más allá de la medianoche.
“Esto no se ha visto en siglos, es maravilloso”, comentaba admirado el obispo de Cádiz, Rafael Zornoza Boy. A su alrededor, en la Catedral de Ceuta esperan doce vírgenes y un Sinpecado para una cita histórica, se admira, “esto no se ve todos los días, eh, padre Francisco”. En el interior del templo sólo están los dos religiosos y el reportero de Ceuta al Día, rodeados de todas las imágenes marianas que este 16 de junio desfilarán ante la primera que llegó a estas tierras, Nuestra Señora de África, en la Magna Mariana que celebra los seis siglos de la diócesis de Cádiz y Ceuta.
Son las 18.50. Es casi la hora, perro un pequeño problema con una de las patas delanteras del paso retrasa la salida, pero unos martillazos a tiempo logran desatascar la rueda que se había encajado, impidiendo colocar las patas. Cinco minutos después de la hora convenida, la banda comienza a sonar. Es la señal. Fuera espera ya una multitud emocionada. Merche, ceutí, lo reconoce abiertamente. “Llevo emocionada todo el día”. Pedimos que nos lo explique, si puede. No puede. “Eso no se explica, solo se puede sentir”, se disculpa. A su lado, un amigo de Madrid, cofrade, que ha recorrido media España para venir a Ceuta, donde tiene buenos amigos del mundo cofrade. “Son muchos momentos, muchas emociones, muchos recuerdos, muchos amigos, es la vida misma”, resume, “y Ceuta es especial, debería ponerse en valor”.
Cuarenta y cinco minutos después, en tiempo y hora, salía el Sinpecado de la Hermandad del Rocío que recorría a caballo la calle Jáudenes para ser el primero en rendir tributo a la Patrona, alcaldesa perpetua y comandante general. Tras él, con la lenta cadencia de estos casos, las Lágrimas, las Penas, Dolores, Amargura.. y poco a poco fueron acumulando largos minutos de retraso… Caridad, Amor, Esperanza, Desamparo… El retraso acumulaba ya más de media hora… Palma, Soledad, Mayor Dolor, Remedios… El retraso supero la hora finalmente, obligando a muchas cofradías a recortar su itinerario previsto para que las bandas que los acompañaban o los costaleros venidos de fuera de la ciudad pudiesen coger el último ferry.
Poco a poco se ponía punto final, con las cofradías desperdigadas por la ciudad en recogida con la certeza de haber vivido una Magna Mariana para la historia.