Incremento en un contrato que para el PSOE ya es suficientemente alto, ya que según los calculos del partido, hay una diferencia entre los gastos de explotación y la cifra que paga la Ciudad de casi diez millones de euros que no saben a qué están destinados.
Inmaculada Ramírez pidió al Gobierno local que en lugar de dar más dinero, se dedique a controlar la gestión de Urbaser para conocer en qué se inviere el dinero y garantizara los servicios, ya que reciben quejas de los ciudadanos alertando sobre la falta de limpieza en las barriadas. Deficiencias no en falta de personal, sino en atención, ya que según Ramírez, los vecinos critican que los operarios llegan pero luego no realizan el trabajo en la zona y "se cruzan de brazos". La diputada socialista afirmó que hay que "rentabilizar lo que tenemos antes que ampliar".