JSCE asegura que el plan se aprobó pocos días antes del plazo que tienen los equipos para saldar deudas con sus jugadores y evitar así el descenso de categoría. El secretario general de Juventudes, Miguel Pérez Triano, ha afirmado que no es de recibo acudir al rescate de una asociación privada cuando el coste va a suponer 300.000 euros más a las arcas públicas de lo que el club ya recibe de forma anual como subvención.
El plan de saneamiento contempla tres anualidades más por importe de un millón de euros, que se retraerán de la subvención de cada temporada, a cambio eso sí de que el club tenga beneficios el año próximo. Pérez Triano también ha criticado que para paliar las deudas de la AD Ceuta se hayan retirado partidas de la Consejería de Fomento destinadas al pago a la Empresa de Alumbrado, con la que ya se mantiene según el líder de los jóvenes socialistas una importante deuda.
Para JSCE no es comprensible que la Consejería de Juventud y Deportes permitiese la desaparición del Consejo de la Juventud y ahora salver a un equipo de fútbol, motivo por el que han pedido la dimisión de la consejera Kissy Chandiramani.
Bel no se acuerda
Por su parte, la portavoz Yolanda Bel ha asegurado en declaraciones a RNE que la situación de la AD Ceuta seguro que no es la misma que la del Consejo de la Juventud, y ha invitado a JSCE a que conozcan los datos antes de realizar ningún tipo de acusaciones. Una información que asegura pueden obtener de la Consejería de Hacienda cuando quieran. Bel ha contestado que no recuerda si se aprobó o no el plan de saneamiento y que desconoce exactamente cual es la situación del club.