La UE alerta de graves deficiencias en el control de la frontera del Tarajal
La Unión Europea alerta en un informe remitido al Gobierno de la Nación que ha detectado deficiencias "graves" en el control de las fronteras exteriores en España y propone una lista con 66 recomendaciones concretas que deben aplicarse en un plazo de tres meses y que afectan especialmente a los pasos fronterizos terrestres de Ceuta y Melilla, a los que dedica un capítulo especial.
“Habida cuenta de la importancia que reviste el cumplimiento del acervo de Schengen, debe darse prioridad a la implementación urgente de las recomendaciones relativas a las deficiencias detectadas en los dos pasos fronterizos terrestres visitados, El Tarajal I (Ceuta) y Beni-Enzar (Melilla), que se consideran graves teniendo en cuenta la situación geográfica de los pasos fronterizos (limítrofes con Marruecos) y la presión migratoria en esta frontera terrestre exterior”, alerta el informe, que hace ocho recomendaciones concretas para el caso del Tarajal.
Controles que deben apoyarse en unas bases de datos y un sistema informático que urge revisarse por lo que recomienda “corregir los fallos del sistema informático relacionados con el cotejo con las bases de datos y prever una actualización técnica del proceso manual de control de las etiquetas de visado y las impresiones dactilares”. Unos medios técnicos que brillan por su ausencia en la frontera terrestre de Ceuta, por lo que la UE pide “dotar a los guardias de fronteras en la primera y en la segunda líneas con equipos de control de documentos suficientes para poder realizar inspecciones documentales de conformidad con los requisitos de Schengen; mejorar la infraestructura de comunicación que utilizan los agentes de primera línea para consultar las bases de datos nacionales, el SIS II y el VIS; garantizar una infraestructura adecuada para impedir la observación no autorizada de las pantallas de ordenador, en particular mediante la instalación de un cable más largo conectado a los lectores de impresiones dactilares”.
Nuevas tecnologías que, recuerda el informe, exigen o más formación en los agentes. Por ello, entre esas 66 recomendaciones, la Unión Europea echa de menos en Ceuta y Melilla más policías especializados en el control de fronteras, policías con idiomas como el francés o el árabe, con experiencia en la lucha contra la inmigración ilegal y formación en detección de documentos falsificados.