Un frío memorando difundido en la página web del jefe del Estado Mayor turco en la noche del 27 de abril de 2007 advirtió que las Fuerzas Armadas no iban a "tolerar ningún atentado contra el Estado laico" y que para ello tomarían "todas las medidas necesarias". Cuando Recep Tayyip Erdogan tuvo noticia del llamado
golpe de Estado electrónico envió a su ministro portavoz, Cemil Çiçek, a la televisión para que leyera el siguiente comunicado: "No aceptaremos ninguna intromisión. El Estado Mayor del Ejército está a las órdenes del Gobierno. El primer ministro convoca elecciones generales para que el pueblo exprese su voluntad".