"Hemos sabido ganar cansados"
30 de octubre de 2011 (10:48 h.)
Cuando el árbitro pitó el final del encuentro, Mourinho alzó los brazos y se fue al interior del campo a felicitar a sus futbolistas -los abrazó uno a uno, Arbeloa, Pepe, Ramos, Casillas...- como celebrando un triunfo por encima del volumen del acontecimiento. Lo que había anunciado el gol de Higuaín, un concierto sinfónico, concluyó como una agonía para el conjunto blanco. Al cabo de la velada, el Madrid logró su octava victoria consecutiva de la temporada, marca que no conseguía desde el año 2009, cuando Juande Ramos dirigía al equipo.