La obra que hoy llega al público bajo el título «Luz del mundo» vierte inesperada claridad sobre los aspectos más humanos del Papa. El ruido desproporcionado en torno a los preservativos dará paso enseguida a un descubrimiento: la humanidad, la sencillez y la modestia de un Papa que es, en realidad, un gigante entre los intelectuales europeos.
Las conversaciones del pasado mes de julio en Castelgandolfo sacan a la luz un Ratzinger en cierto modo similar al que los periodistas disfrutan durante los encuentros con el Papa en el avión. Benedicto XVI es mucho mejor cuando habla espontáneamente y ...