Rabat centra sus esfuerzos en anular a los activistas de la «nueva élite» saharaui
22 de noviembre de 2009 (11:14 h.)
«La solución es un regreso al Sahara ocupado (por Marruecos), con o sin pasaporte. Si no, seguiré aquí en huelga de hambre hasta la muerte», afirmó ayer a ABC Aminatu Haidar por teléfono desde el aeropuerto de Lanzarote. Su caso se ha convertido en una patata caliente entre Rabat y Madrid.
De esta forma la activista, expulsada hace ocho días de El Aaiún despojada de su documentación, quiere dejar «claro» que rechaza pedir a Rabat otro pasaporte, pues dice que el suyo -con número R559514- tiene validez hasta mayo de 2010. Rechaza además ser considerada refugiada, como le ofrece el Gobierno esp...