Risas, famosos y un wáter en la cena de la prensa de la Casa Blanca

Obama ironiza sobre la presencia de Kim Kardashian en la gala a la que este año han asistido, entre otros, Lindsay Lohan, George Clooney o Eva Longoria

Kasey Schmiedt, Emily Henderson y Michelle Mashiow, de 19 años, llevan tres horas frente al Hotel Hilton de Washington desafiando la lluvia racheada y el viento desapacible de la capital de Estados Unidos. Se agarran a sus cámaras de foto para despistar el frío. La espera merecerá la pena si consiguen ver a su ídolo, Josh Hutcherson, protagonista de la película Hunger Games, o a Lindsay Lohan. Mederith Colbert, de 58 años, también está esperando junto a las chicas porque quiere ver a George Clooney. Como ellas, un centenar de curiosos se agolparon ayer por la tarde frente a las puertas del hotel para robar una foto a alguno de los famosos que estaba previsto que acudirán allí.

Lo que se celebraba, sin embargo, no era una entrega de premios o un estreno cinematográfico, sino la cena anual de los corresponsales de la Casa Blanca, un evento organizado por la asociación que agrupa a los medios de comunicación encargados de cubrir todo lo que ocurre en el 1.600 de Pennsylvania Avenue (la dirección de la residencia del Jefe de Estado de EE UU) para conmemorar la importancia y la vigencia del periodismo político y al que siempre asiste el presidente del país. A priori, semejante gala solo podría interesar a los miembros del gremio pero, sin embargo, cada año consigue aunar a las figuras más relevantes de la prensa con las caras más conocidas del cine, la televisión y el mundo del espectáculo estadounidense.

Se trata de una cena distendida y nada barata –el cubierto cuesta 225 dólares (unos 170 euros)- en la que se otorgan premios a la profesión y en la que el presidente y su anfitrión, normalmente un presentador de un late show, pronuncian discursos irónicos y en clave de humor, en los que se repasa de manera relajada la actualidad política y la cobertura de los medios de comunicación.

Un ejemplo claro ha sido el discurso de Barack Obama. Al más puro estilo Club de la Comedia, el presidente ironizó acerca de su lugar de nacimiento, en un guiño al Partido Republicano que en ocasiones cuestiona que fuera en EE UU; del reciente escándalo del Servicio Secreto en Cartagena de Indias (Colombia); de su más que probable contrincante en las elecciones presidenciales, Mitt Romney, a cuenta de sus respectivas mascotas y, sobre todo, acerca de sí mismo.

Obama comnezó su intervención con su voz en off desde el cuarto de baño, con sonido de cadena de wáter incluido, tarareando una canción, algo a lo que cada vez es más aficionado, y preguntándose qué hacía en esa gala teniendo que presentar al humorista Jimmy Kimmel -el anfitrión de este año- y compartiendo cena con Kim Kardashian -“¿Por qué es famosa Kim Kardashian?, bromeó- Ya en el estrado, ironizó sobre su imagen comparando la que tenía en 2008 cuando llegó a la Casa Blanca -mostrando una foto suya sonriente-, con su aspecto actual, -enseñando una fotografía en la que aparece cabizbajo-, y con la que tendrá dentro de cuatro años, -con una foto del actor Morgan Freeman-.

En la heterogénea alfombra roja que han formado los más de 900 invitados a la gala, los más buscados han sido han sido Lindsay Lohan, con un vestido negro abierto por la espalda, y Kim Kardashian. La pareja ha compartido mesa con los periodistas de la cadena FOX, que las ha invitado. Cada medio de comunicación puede convidar a uno o dos comensales. Time ha llevado a George Clooney y a Steven Spielberg, un fijo desde 2009; Bloomberg a Charlize Theron; Daily Beast a Viola Davis y a una embarazada Reese Witherspoon, que se estrenaba en este evento, al contrario que el elenco de la serie Modern Family que asistió por segundo año consecutivo. Una de sus protagonistas, la colombiana Sofía Vergara, sirvió a Kimmel de gancho para inaugurar las bromas de su discurso aludiendo a su país y al escándalo del Servicio Secreto.

Eva Longoria, una de las mayores activistas a favor de Obama en Hollywood y que la semana pasada criticó la política de Romney respecto de los latinos, también ha sido de las más buscadas. Desde que George W. Bush abandonara la Casa Blanca, los actores parecen tener menos reparos en asistir a esta cena.

Además de famosos y periodistas, a la gala también han acudido políticos como el todavía candidato republicano a la presidencia Newt Gingrich y su esposa Callista, objeto de varias bromas por parte de Obama y de Kimmel, o el exsecretario de Estado, Colin Powell.


Posted originally: 2012-04-29 07:00:38