El francés Sebastien Loeb (Citroen) se hizo con su sexto título tras ganar el rally de Gran Bretaña, última cita del mundial, tras dominar la prueba desde el primer día y, aunque sentenció ayer, se favoreció de los problemas que tuvo hoy su gran rival el finés Mikko Hirvonen (Ford). Al escandinavo le acompañó la mala suerte. En el tercer tramo de la prueba, en plena persecución del francés, un salto en un cambio de rasante levantó el capó de su coche y le dejó sin visión, con lo que tuvo que parar a bajarlo en una acción que le hizo perder más de un minuto de tiempo.