El Real Madrid se deshizo (73-66) de un buen CB Murcia en el partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga ACB que se disputaba en Vistalegre, done el lituano Darius Lavrinovic, que venía de lograr 49 de valoración en la Euroliga, volvió a ser el mejor de los merengues (22 puntos y 25 de valoración) con un último cuarto sensacional.  

   El conjunto de Ettore Messina, que venía de perder en Euroliga contra el Khimki de Scariolo, salió muy fuerte intentando imponer un ritmo alto y consiguió una buena renta (27-20) al final del primer cuarto. Durante el segundo parcial el conjunto local no levantó el pie del acelerador y se fue al descanso con la máxima renta del partido (43-32).  

   Durante los segundos 20 minutos el CB Murcia fue mejor que el Real Madrid y consiguió reducir la renta y poner en aprietos al conjunto merengue que acusaba el cansancio del partido tan exigente que disputó en el miércoles en Moscú. Novica Velikovic fue el encargado   de sostener a los de Messina ante el arreón pimentonero del tercer   cuarto.  

   Ya en el último cuarto surgió la figura de Darius Lavrinovic, el pivot lituano desaparecido durante todo el encuentro tomó las riendas de su equipo y anotó los primeros 12 puntos de los blancos en este parcial. Cuando el conjunto visitante más apretaba, Lavrinovic con   dos acciones de canasta y tiro adicional y con su dominio en la zona   aseguraba la victoria para los madridistas.  

   Además, Louis Bullock que disputaba su partido 200 en la ACB fue de más a menos durante el encuentro y acabó con siete puntos. Con esta   victoria el conjunto madridista se afianza en la parte alta de la   clasificación.   

Sorpresa en Valladolid
 

   En el Polideportivo Pisuerga, el Blancos de Rueda Valladolid protagonizó la sorpresa de esta cuarta jornada al derrotar (66-61) a un Gran Canaria 2014 que venía de ganar al todopoderoso Regal FC Barcelona. Los canarios que firmaron un paupérrimo primer cuarto con   solo diez puntos anotados fueron a remolque de los pucelanos durante todo el partido. Brian Chase con 18 puntos y 13 de valoración fue el mejor del partido.  

   En otro de los partidos destacados de la jornada el Valencia Basket Club ganó (65-82) a domicilio al CB Granada comandados por un sensacional Rafa Martínez que firmó 18 puntos y 17 de valoración. El conjunto de Neven Spahija dominó el encuentro en todo momento y   siempre fue por delante en el marcador. Con esta victoria el conjunto 'ché' logra afianzar su plaza de 'play-off'.  

   Por último, el  Suzuki Manresa derrotó (62-57) al Bizkaia Bilbao Basket en un partido que estuvo igualado hasta los últimos momentos   del partido. Los locales cimentaron su victoria en una gran segunda parte y en concreto en un magnífico tercer cuarto donde 'secaron' a   los vascos dejándoles en solo nueve puntos en ese parcial. Román   Montáñez con 14 puntos fue el más destacado de los catalanes.   
 

El magnífico partido de Lavrinovic no pudo evitar que el Real Madrid comenzase su asalto a la Euroliga con derrota. El lituano se «comió» él solito a las dos torres de Scariolo, que esperaban darse un festín ante el mermado juego interior madridista. Javtokas y Mozgov superaban en kilos y en centímetros a todos los hombres altos del rival, aunque no contaban con la aparición de Darius. Lavrinovic se encargó de frenar la sangría bajo el aro con la que el Khimki comenzó el encuentro, para después ir poco a poco construyendo una estadística fantástica: 32 puntos y 11 rebotes en 34 minutos de juego, con unos porcentajes de tiro por encima del 60 por ciento, para alcanzar los 49 puntos de valoración fue el resumen de la tarde del pívot en Rusia. Sin Reyes ni Van den Spiegel tuvo todo el protagonismo en la pintura, aunque al final el desgaste le llevó a fallar algún lanzamiento libre que pudo ser decisivo.
Su socio más inspirado fue Kau- kenas, que se encargó de ayudar en la anotación a su compatriota, además de tomar la responsabilidad del tiro exterior en los últimos minutos, porque Bullock ayer no estaba para nada ni para nadie.
El Real Madrid no jugó bien en ningún momento, aunque su solidez le mantuvo siempre cerca del Khimki, que amenazó con romper el partido muy pronto (17-10, min 9) y a falta de tres mi- nutos pareció capaz de sentenciar (70-65). Pero los blancos ahora no se descomponen tan rápidamente como el año pasado, así que se las apañaban para volver a igualar el marcador o incluso ponerse por delante. Les faltó consistencia en el arreón definitivo, algo muy parecido a lo que sucedió con Unicaja y que terminó solucionándose de la misma forma: en la prórroga.
Para entonces, Cabezas ya llevaba bastante tiempo guiando el destino de los rusos, excepto cuando Langford decidía resolver por su cuenta, sin importarle que su tiro no fuese la mejor opción. El malagueño estuvo en cancha los últimos veinte minutos de partido, en los que anotó otros tantos puntos, algunos cuando realmente eran necesarios. Él se bastó para mantener la producción ofensiva de los rusos y fue clave en la primera derrota oficial de Messina en una cancha en la que quedó demostrado que no será fácil ganar.