El Foro de la Educación de Ceuta, el órgano consultivo creado hace algo más de 12 años para, entre otras cosas, "promover la mejora de la equidad y la calidad de la enseñanza en todos sus aspectos" en la ciudad, se ha reunido este miércoles a última hora de la tarde en sesión extraordinaria para hacer una “puesta en común de los datos sobre la Educación Especial” después de que el pasado 9 de noviembre sus miembros acordasen por unanimidad “exigir” al Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) plantillas “suficientes y estables”, tanto de profesorado como de personal de servicios complementarios, para garantizar una atención a la diversidad "digna".

La directora provincial, Yolanda Rodríguez, reaccionó a ese acuerdo, que causó estupefacción en Madrid, solicitando sendos informes a la Inspección y a la Unidad de Programas Educativos que han concluido, en resumen, que los recursos humanos existentes en Ceuta para atender al alumnado con necesidades especiales o específicas de apoyo educativo son superiores a las exigencias legales y a los disponibles en otras regiones.

Más allá de alguna valoración subjetiva (que son "adecuados", algo de lo que discrepa la mayoría de los demás agentes educativos y sociales), los técnicos han solicitado a los Servicios Centrales más celeridad en la tramitación de las contrataciones y la cobertura de las bajas de personal laboral como los 'cuidadores', así como parámetros objetivos para cuantificar hasta dónde deben llegar las plantillas "estructurales" que actualmente completan bien entrado el curso los Planes de Empleo.

La discusión se ha decantado, una vez tratado el malestar de quienes no querrían que la ciudadanía conociese los datos al detalle, hacia el fondo, donde la inmensa mayoría coincide, con discrepancias sobre si conviene más alzar la voz o negociar entre bambalinas, en varias cuestiones sobre las que no se ha alcanzado ningún acuerdo formal.

La más trascendente, que la normativa de hace casi 12 años a la que se remite el MEFP para decir que cumple todos los requisitos en materia de recursos humanos es “obsoleta” y “ambigua”, nada que ver con la que han desarrollado las distintas Comunidades Autónomas, por lo que debería renovarse cuanto antes.

También que tendría que modificarse el procedimiento de dotación de medios a los centros para fijarlo “con exactitud y el máximo rigor posible”, una de las recomendaciones de la Inspección en su minucioso informe. Y que con más ‘cuidadores’ o maestros de apoyo o especialistas “no se resuelve” la ecuación de una Educación Especial “digna”.

Hace falta, se ha llegado a un principio de consenso informal, profundizar igualmente en cómo se usan esos recursos en cada centro (que los maestros de apoyo lo sean del alumnado vulnerable, no para ir tapando necesidades ordinarias de personal), en si se descarga toda la responsabilidad sobre ellos cuando están en las aulas, en si conviene o exigir al MEFP más medios o repartir la falta de recursos entre los profesionales disponibles para no ser incómodos (en Melilla los 'cuidadores' son escasos porque los docentes asumen sus tareas)...