Las parroquias de Santa María de África y de Santa Teresa de Jesús acogerán este jueves y este viernes la cuarta sesión del 'Proyecto de ayuda a familias' que cofinancian Cáritas Diocesana de Cádiz y Ceuta y Cáritas Diocesana de Ceuta. Esta iniciativa responde directamente a las directrices marcadas por la IV Asamblea Diocesana de Cáritas celebrada en noviembre de 2011 para el trienio 2012–2014. Una de sus líneas de acción apuesta literalmente por "avanzar desde la acción de base de las Cáritas Parroquiales hacia un apoyo más promocional a las personas en situación de exclusión o vulnerabilidad social y sentar la bases para un trabajo integral con familias".

Este proyecto tiene como objetivos "mejorar la situación de vulnerabilidad de las familias acogidas", "colaborar en la cobertura de las necesidades básicas de las familias que acuden a los Servicios de Acogida y Atención Primaria de las Cáritas Parroquiales", "crear espacios de grupo de apoyo mutuo para compartir experiencias y conocimientos que puedan beneficiar unos a otros" y "potenciar y apoyar a las familias en su desarrollo como núcleos de apoyo para sus miembros".

El programa incluye cinco sesiones grupales para un total de 24 familias que cumplen el perfil para participar escogidas entre las 7 diferentes Cáritas parroquiales. Las familias se han dividido en dos grupos según su zona de residencia: uno se reunirá en los salones de la Parroquia de Nuestra Señora de África y otro en los salones de la de Santa Teresa.

"Se trata de aportar una ayuda económica de 100 euros en cada sesión a las familias para la adquisición de productos de primera necesidad hasta completar un total de 500 euros por familia", ha informado Cáritas.

En las sesiones grupales las familias puedan compartir sus dificultades y necesidades "como espacio de ayuda mutua, de acompañamiento y solidaridad comunitaria" y poner sobre la mesa asuntos como los hijos, la comunicación familiar o la administración del hogar. Las sesiones grupales tienen una duración de 90 minutos y se producen semanalmente o cada 15 días según las necesidades de las familias participantes. Además, se realiza un seguimiento individualizado desde un acompañamiento social.