No resulta extraño que en el informe de la OCDE sobre calidad de vida en más de 350 regiones Ceuta fuera de las peores para llevar una buena vida: paro galopante, fracaso escolar de alerta roja, pobreza insoportable y ahora además un importantísimo porcentaje de población que sufre alguna discapacidad. Según los datos arrojados este viernes por la consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, Ceuta con un 11,3 por ciento de la población con discapacidad de algún tipo y grado es la segunda autonomía de las 19 de España con más porcentaje de discapacidad en su ciudadanía. Sólo Melilla supera a la dulce, pequeña y marinera Ceuta.

Rabea aludió al menos a la estadística manejada por las Administraciones competentes con el IMSERSO a la cabeza. Pero por fortuna, según el discurso de los populares, la situación de esa importante parte de la ciudadanía aquí en Ceuta y en el resto del país va a cambiar gracias a la aprobación el pasado 12 de septiembre del Plan de Acción 2014-2016 de la Estrategia Española de Discapacidad. Un plan cuyas líneas maestras se pueden consultar en la web de Moncloa y ha repasado este viernes Rabea Mohamed desde la sede de los populares en Ainara.

Casi 3.100 millones de euros para mejorar la situación de las personas que sufren discapacidad, toda vez que se puede apostar por dedicar dinero a estas cuestiones “superada la crisis”, según Mohamed. Y toda vez que la Ley de Dependencia se encontró sin fondos y hubo que reducir a las personas dadas de alta en la Seguridad Social como cuidadores de personas dependientes pasando de 426 a 3 en Ceuta en los últimos ejercicios.

Una situación que se avisó ya hace tiempo, según explicó Mohamed y que es consecuencia de abordar políticas y hacer planes “sin la debida estimación presupuestaria y sin conocer cuál es la repercusión económica que iba a tener”. Aún así, según Mohamed “la mayor garantía para una persona discapacitada es recibir servicios prestados por profesionales y no dejarlos en manos de personas no profesionales aunque sean familiares directos”, ha simplificado el asunto Rabea Mohamed.

Cuánto caerá en Ceuta de esos cerca de 3.100 millones de euros es aún una incógnita. Lo que sí se sabe es que el Plan prevé 96 medidas repartidas en 5 ejes de actuación, con implicaciones transversales y designando en cada Ministerio un responsable de velar por que las medidas desarrolladas tengan en consideración a esta parte de la población, a imagen y semejanza de lo que ya se venía haciendo con la igualdad.

Los ejes y objetivos que recoge el plan son la igualdad para todas las personas, el empleo, la educación, la accesibilidad y la dinamización de la economía. Con diversas medidas en cada una de esas áreas de tratará de mejorar la situación y la calidad de vida de los discapacitados y sus familias.

Más de 5 millones desde la Ciudad Autónoma

En Ceuta en cualquier caso entre las consejerías de Sanidad y Asuntos Sociales ya se vienen destinando 5,5 millones de euros en políticas que repercuten de forma directa en atender a ese 11,3 por ciento de los ceutíes que sufre alguna discapacidad.

Las inyecciones al CERMI se llevan 1,8 millones, la ayuda a domicilio pagada a medias con el IMSERSO consume 1,9 millones, la teleasistencia se lleva 1,1 millones, el convenio con Cruz Blanca para las plazas de residencia de mayores, 295.000 euros; otros convenios como el de la Fundación Gallardo o las ayudas a la fibromialgia suman otros 486.000 euros , más mejoras para sedes y ayudas técnicas de hasta 20.000 euros para enfermedades raras acaban por redondear la cifra en esos 5,5 millones de euros, según el desglose realizado por Rabea Mohamed.

Ayudas que se vienen recibiendo con cargo al Estado en algunos casos, como los pensados para entidades que atienden a discapacitados de alguna clase, desde 2007 por un valor de 2 millones de euros y que han provocado en algunos ejercicios de apreturas en los que no se renovaron convenios o llegaron tarde los pagos apuros para la Ciudad Autónoma que es al final la gestora de esos fondos, que se espera se vean incrementados con este plan.