La Fundación Gallardo ha celebrado este sábado su tradicional ¡potajá solidaria’, un evento lúdico y de hermanamiento que el centro acostumbraba a organizar cuando se acercaban las Navidades y que la pandemia cortó de cuajo hasta este 2022 cuando han retomado la actividad.

“Venimos con muchísimas ganas porque esta época que hemos pasado de pandemia no lo hemos podido celebrar y es una festividad que a nosotros nos encanta porque es un día que nos juntamos profesionales, usuarios, familiares de todos nosotros y todo el que quiera venir de la calle, es un día con música, de Navidad y para poder pasar un buen rato”, ha explicado Luz Marina Gallardo, coordinadora de la Fundación.

Los asistentes han podido disfrutar de comida casera, garbanzos con choco, fideua, albóndigas, empanadillas o tortilla de patatas, entre otros platos. Además las manualidades realizadas por los usuarios en la terapia ocupacional se han puesto a la venta para recaudar dinero que la Fundación empleará en comprar más material para poder seguir organizando más actividades.

La vista la tienen puesta ya en los Carnavales de hecho cuando esperan organizar una fiesta y fabricarse sus disfraces.