En gran parte se trata de ex trabajadores de la construcción que encuentran en la mano de obra ilegal el gran hándicap para insertarse en el mercado laboral.

“La principal reclamación que realizamos es sobre la inspección de trabajo. Diariamente entran en Ceuta 40.000 personas a trabajar en condiciones ilegales. Somos padres de familia de Ceuta con cargas familiares, pagamos nuestros impuestos, escolarizamos a nuestros hijos. Nos encontramos con que en estos veinte kilómetros cuadrados no hay industria. El trabajo local que hay, principalmente de la construcción, se lo están dando a gente de fuera, que tienen el mismo derecho, pero en igualdad de condiciones. Cuando a estas personas se les contrata ilegalmente, se les paga 700 euros al mes por trabajar diez horas diarias, cuando lo legal sería mil euros por ocho horas, respetando los convenios y la leyes, los perjudicados somos nosotros, pues se produce una competencia desleal” comentó uno de los organizadores de las movilizaciones.

Los parados seguirán con sus reivindicaciones. Según fuentes sindicales de CCOO, sindicato que les apoya logísticamente, “a partir de mañana se repartirán 20.000 panfletos informativos para contrarrestar el mutismo informativo dictado por el Gobierno de Vivas en determinados medios sobre este asunto”.